Praga.- El llamado «Muro de John Lennon», único lugar del centro de Praga donde los grafiteros exponen su creatividad desde hace casi medio siglo, ha sido revitalizado gracias a obras de una veintena de artistas de cinco países.
Desde comienzos de los años 1970, en plena época comunista, este muro, situado en la tapia de la sede de los Caballeros de la Orden de Malta, fue testigo de las primeras expresiones artísticas de protesta contra la falta de libertades durante el comunismo.
Tras el asesinato en 1980 de John Lennon, figura emblemática de «The Beatles», se creó en este lugar un sencillo monumento funerario en su honor, convirtiendo el muro en santuario del movimiento pacifista a espaldas del régimen.
Con motivo este año del 30 aniversario de la llegada de la democracia a Checoslovaquia (ahora República Checa), el muro ha sido renovado en una superficie de unos 150 metros gracias a nuevas obras de artistas locales y otros de Eslovaquia, Serbia, Canadá, Omán y los Emiratos Árabes Unidos.
Un retrato gigante del primer presidente tras el comunismo, Vaclav Havel, eslóganes filantrópicos, símbolos de la campaña antinuclear y recuerdos de las tres décadas que pasaron desde el retorno de la ansiada libertad, son algunos nuevos motivos del muro.
«A future of freedom», «Don’t sell your dreams», «Czech Republic celebrates 30 years of freedom», son algunos lemas que recuerdan el cambio democrático de 1989.
En cada aniversario del asesinato de Lennon, hubo aquí concentraciones de simpatizantes de una «ideología» (la libertad) que el régimen comunista llamaba despectivamente «Lennonismo».
Estos encuentros de la disidencia están considerados por algunos historiadores como el germen de las marchas estudiantiles de protesta de noviembre de 1989, que pasaron a la historia como «Revolución de Terciopelo».
Durante el período comunista, exponentes del mundo «underground» se dedicaban -siempre a escondidas de las autoridades- a esta expresión de arte callejero, usando sobre todo tiza blanca.
Hoy son estudiantes de arte, alguna celebridad o miembros de movimientos artístico de protesta los que, a plena luz del día, muestran sus destrezas con tubos de aerosol ante las cámaras. EFE
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