Inesperada huelga de autobuses en Londres para las Olimpiadas

Casi dos tercios de los autobuses urbanos de Londres quedaron hoy fuera de circulación debido a una huelga de conductores convocada para reclamar un pago extra de 500 libras (615 euros) por trabajar durante los Juegos Olímpicos de este verano.

Trabajadores de 17 compañías que operan los autobuses de la capital británica iniciaron a las 2.00 GMT de esta madrugada un paro de 24 horas que ha contado con un «sólido» seguimiento, según el sindicato Unite, algunos de cuyos miembros amenazaron con organizar nuevos paros durante los Juegos.

La empresa pública que coordina los sistemas de transporte en Londres, Transport for London (TFL), señaló por su parte que «muchas rutas quedaron interrumpidas», mientras tan solo un tercio de los trayectos habituales funcionaban con normalidad.

Para tratar de aliviar el caos en el sistema de transporte de Londres, la compañía incrementó el personal dedicado a informar sobre rutas alternativas en las principales estaciones.

Los conductores de autobús reclaman una prima similar a la que han pactado los trabajadores del Metro de Londres y otras compañías de transporte, que recibirán entre 500 y 900 libras (de 615 a 1.107 euros) como compensación por trabajar durante los Juegos Olímpicos y Paralímpicos, cuando se prevé un aumento masivo de pasajeros en el la red pública de Londres.

Durante las negociaciones de los últimos días, las compañías de transporte ofrecieron pagar un extra a los conductores de rutas que pasen por recintos olímpicos, oferta que rechazaron los trabajadores.

«Esta lucha es de los trabajadores de Londres al completo. Los turistas que vienen a ver los Juegos estarán por todos los rincones de la ciudad», señaló el conductor Ismael Kanu, que subrayó que, «si es necesario», se convocará una nueva huelga durante las Olimpiadas, del 27 de julio al 12 de agosto.

Diferentes colectivos han amenazado en los últimos meses con ir a la huelga durante los Juegos, cuando se espera que un millón de personas adicional utilice cada día el transporte público, lo que supondrá unos tres millones de desplazamientos extra cada día.

Si bien los conductores, electricistas y mecánicos del metro de Londres acordaron hace pocas semanas con la compañía las compensaciones por trabajar durante los Juegos, en los últimos días han sido los trabajadores de los centros de control del suburbano los que han amenazado con parar durante la competición deportiva como protesta por el cambio en sus condiciones laborales.

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