Quito, 22 de mayo (API).- Parece fruto de una mala costumbre, Deportivo Quito no reanudó las prácticas y la pretemporada se pospondrá hasta que la directiva responda por los tres meses de deuda que mantienen con la plantilla de jugadores.
Todos los miembros del equipo han decidido no acudir a las prácticas hasta que la dirigencia se siente a hablar con ellos y se llegue a un acuerdo de pagos que permita generar tranquilidad en todos los rubros. El gerente de la institución, Wladimir Ortiz, comentó: “Esta directiva es seria, pero venimos arrastrando problemas de otros años”. Este, por ahora, es el único pronunciamiento de oficial del club que espera que el problema se resuelva pronto para que las prácticas se ejecuten y la plantilla llegue en las mejores condiciones para el remate de la Primera Etapa y el arranque de la Segunda.
De parte de los jugadores, Edison Vega fue tajante al decir: “El reglamento de la FEF quita un punto por cada tres meses de deuda”. El centrocampista, y capitán de la institución, no quisiera que el equipo sea sancionado pero busca una salida para la complicada situación que la economía del club los hace vivir.
Finalmente, se confirmó la posibilidad que el hijo adoptivo de Jaime Iván Kaviedes, Marcos Micolta, se una a la institución por el resto de la temporada tras dejar Liga de Loja por un desacuerdo vivido con la directiva durante los últimos días de Alex Darío Aguinaga como técnico.
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Foto: Archivo