En el estadio Olímpico Atahualpa, Deportivo Quito perdió 1-0 con Barcelona SC y se acerca a la Serie B.
Quito (API).- Sin jugar su mejor partido, Barcelona se impuso a Deportivo Quito con un penal polémico que aprovechó Brahian Alemán. El propio centrocampista uruguayo dejó al Ídolo con uno menos ante un rival que desesperó y que se queda al borde del descenso a la Serie B.
Ante cerca de 15.000 personas en el Estadio Olímpico Atahualpa, Deportivo Quito no pudo con Barcelona y se queda al borde del descenso a la Serie B. El equipo de Almada va encontrando su base y hoy demostró varias interesantes micro-sociedades.
A los 10 minutos del encuentro, una falta dudosa contra Tito Valencia fue juzgada por el árbitro como penalti. Tras de la pelota fue Brahian Alemán que definió sin problemas frente a Lemos para marcar 0 a 1 en El Batán. Cuarto tanto del charrúa en 32 partidos con la camiseta amarilla de Barcelona.
El primer tiempo encontró a un Deportivo Quito desbocado, pero sin mayores recursos. Sevilla desesperaba en la banca, invitó a sus jugadores a apretar, plantarse como un equipo compacto y forzar al error a los guayaquileños.
En las vísperas del descanso, Brahian Alemán vio la roja por doble amonestación tras una falta sin historia en la mitad de la cancha que advirtió el juez central y que no le perdonó. Deportivo Quito, sin embargo, no mostró condiciones para desequilibrar el trámite y buscar la igualdad.
Para el complemento, Deportivo Quito mandó toda la carne al asador y asedió a un Barcelona ordenado en defensa. Con muy poco fútbol, los chullas fueron empujando a su rival contra su campo para bombardear de pelotazos.
Blanco, que había ingresado para tratar de equilibrar el trámite del partido en ofensiva, terminó siendo un tercer zaguero central en Barcelona junto a Checa y Marques. La desesperación se vivió de principio a fin. El Quito presionó sin cesar, pero la actitud no bastó en el Atahualpa.
Los últimos minutos fueron muy emotivos. Barcelona atricherado en su campo, Deportivo Quito proyectándose con hasta siete jugadores en ofensiva. Máximo Banguera e Ismael Blanco se convirtieron las principales figuras de la visita. El coraje del equipo de Almada hizo la diferencia ante los chullas que empiezan a despedirse de la Primera División y que se tendrá que jugar la vida casi sin margen de error. (D).
