Nueva York, 17 jul (EFE).- El petróleo de Texas encadenó hoy su quinto día consecutivo de avances al subir el 0,89 % y cerrar en 89,22 dólares el barril, su nivel más alto desde finales de mayo, después de que la Fed no ofreciera hoy indicios de nuevas medidas de estímulo monetario y en un día de renovadas tensiones sobre Irán.
El llamado «oro negro» encadenó este martes su quinta jornada de avances consecutivos después del poco alentador panorama económico pintado hoy por el presidente de la Fed, Ben Bernanke.
Bernanke alertó en el Congreso que los riesgos para el crecimiento han aumentado por la tensión en los mercados y en las economías europeas incluso tras las medidas anunciadas por la Eurozona para recapitalizar los bancos españoles en apuros.
En la apreciación del crudo de referencia en EE.UU. también tuvo que ver la tensión entre los países occidentales e Irán en el golfo Pérsico, después de que parlamentarios iraníes debatieran la semana pasada una propuesta de ley para cerrar el estrecho de Ormuz.
Ese estrecho es uno de los pasos marinos más estratégicos del planeta, pues por esa vía salen de los países del golfo Pérsico los petroleros que transportan alrededor del 20 % del crudo que se consume en el mundo.
Irán ha advertido reiteradamente que cerrará el estrecho de Ormuz, lo que podría tener consecuencias de alcance impredecible, si es agredido por Israel o Estados Unidos, que han amenazado con ataques militares a Teherán si no suspende su programa nuclear. EFE