A más del recorte salarial del 10 % para unos 80 funcionaros del Consejo Nacional Electoral (CNE), también se reducirá la plantilla de trabajadores de 630 a 520, según confirmó este viernes el presidente del organismo Juan Pablo Pozo.
Según Pozo, en los 40 días de su gestión, acordó con los demás consejeros aplicar varias políticas de austeridad y una de ellas es el redimensionamiento del talento humano, para lo cual anunció que en marzo habrá una evaluación a nivel del Instituto de la Democracia y de las 24 delegaciones provinciales electorales.
Las políticas de ajuste se extienden para la adquisición de bienes muebles e inmuebles, equipos de mantenimiento y una migración de personal que laboraba en edificios arrendados, hacia la planta central para evitar arrendar bienes inmuebles.
También se pondrán límites a las horas suplementarias, horas extraordinarias, excepto para las personas que colaboran con el concurso que lleva adelante el CNE para la designación de los consejeros del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social.