La sociedad brasileña rechaza la privatización de la estatal Petrobras y cualquier planteamiento en esa línea provocaría un efecto «perturbador», afirmó hoy el presidente de la petrolera, Pedro Parente, en medio de una nueva polémica sobre el futuro de la compañía.
«La sociedad brasileña no desea la privatización de Petrobras. Lo digo porque es incluso apuntado por encuestas realizadas por institutos, entidades bastante respetables», señaló Parente en un encuentro con periodistas en Río de Janeiro.
Apenas unas horas antes, el gobernador de Sao Paulo y posible aspirante a una candidatura para las presidenciales de octubre, Geraldo Alckmin, defendía la privatización de Petrobras en caso de alcanzar la Presidencia.
«Muchos sectores de Petrobras pueden ser privatizados. Innumerables áreas que no son el corazón, el centro objetivo de la empresa, todo eso puede ser privatizado. Si tuviéramos un buen marco regulatorio, incluso se puede en el futuro privatizar todo», dijo hoy Alckmin.
Un planteamiento que, según Parente, «no tiene sentido» en estos momentos para una compañía inmersa en un proceso de reestructuración tras haber sido el epicentro de una red de corrupción sin precedentes en la historia de Brasil.
«Cualquier discusión sobre una eventual posibilidad de privatización de Petrobras, tendría un efecto perturbador de ese proceso muy grande», insistió Parente.
En el marco de su plan de desinversión, la petrolera brasileña anunció el inicio del proceso para la venta de su refinería de Pasadena (Texas, Estados Unidos), que fue blanco de investigaciones por el escándalo de la corrupción destapada en Petrobras.
«No es posible adelantar su valor en el mercado», apuntó hoy Parente en relación al precio de venta de la refinería, con capacidad para procesar 110.000 barriles diarios.
Petrobras cerró el pasado año con una producción promedio diaria de 2,65 millones de barriles de petróleo y gas natural equivalente, un volumen récord, un 0,9 % superior al del ejercicio anterior.
En contraste, su producción, tanto de petróleo como de gas en el exterior, disminuyó debido a las desinversiones realizadas por la empresa y a la venta de sus activos en Argentina.
La producción de petróleo de Petrobras en el exterior en 2017 fue de 64.000 barriles diarios, con una reducción del 20 % frente a la de 2016, y la de gas natural de 8,3 millones de metros cúbicos diarios, con una caída del 39 % .
La compañía tiene un plan para el periodo 2018-2022 que prevé inversiones por 74.500 millones de dólares. EFE