La Bolsa de Moscú y el rublo se desplomaron hoy arrastrados por la compañía Rusal, uno de los mayores productores de aluminio del mundo, que acumula una pérdida de casi el 25 % de su valor de mercado, tras ser golpeada por la nueva tanda de sanciones de Estados Unidos.
El índice de referencia RTS de la Bolsa de Moscú caía un 11,4 % a las 18.30 hora local (15.30 GMT), al tiempo que las pérdidas afectaban a todas las grandes empresas minerometalúrgicas del país, además de los dos principales bancos estatales y el gigante gasístico Gazprom.
A la Rusal del oligarca Oleg Deripaska le siguen en pérdidas las mineras Mechel (18,76 %) y Polus (16,75 %), también sancionada por Washington; el banco Sberbank (15,99 %), el más importante de Rusia, y la metalúrgica Polymetal.
Por otro lado, la divisa nacional, que llevaba mucho tiempo estabilizada en una horquilla de entre 55 y 57 rublos por dólar estadounidense -inmune incluso a los vaivenes del precio del petróleo- se precipitó hoy por debajo de los 60 dólares por rublo.
El euro, que cerró la semana pasada por debajo de los 71 rublos, llegó a situarse hoy en la bolsa de divisas por encima de los 75, lo que no se veía desde agosto de 2016.
Deripaska, dueño de Rusal y uno de los accionistas mayoritarios del gigante de níquel Nornickel, ya es investigado en Estados Unidos como parte de la llamada trama rusa por sus supuestos lazos con Paul Manafort, exjefe de campaña del presidente estadounidense, Donald Trump.
Además de Deripaska, en la lista de sancionados por EE.UU., entre empresas e individuos, figuran Kirill Shamalov, yerno del mandatario ruso, Vladímir Putin, y uno de los principales accionistas de la energética Sibur; Viktor Vekselberg, presidente de Renova; Suleimán Kerímov, que controla la compañía extractora de oro Polyus, o Vladímir Bodgánov, director de la petrolera Surgutneftegaz.
Entre los altos funcionarios figura Alexéi Miller, estrecho aliado de Putin y jefe del consorcio gasístico Gazprom; Nikolái Pátrushev, secretario general del Consejo de Seguridad, o Andréi Kostin, director del banco VTB.
Los sancionados -siete oligarcas y diecisiete funcionarios- verán congelados sus activos bajo jurisdicción estadounidense. EFE