Roma, (EFE).- El cineasta español Richard García ha participado en un taller paralelo al Festival italiano de Capalbio para avanzar en su primer guión original de largo, una «dramedia» sobre el acoso que sufren los ancianos gais en algunos geriátricos.
El Festival de Capalbio, en la región de Toscana (centro del país), concluye hoy y paralelamente a su desarrollo ha tenido lugar la primera edición en Italia del taller creativo de Sundance Institute, organización fundada en los años ochenta por el actor estadounidense Robert Redford.
García ganó el certamen en 2012 con su aplaudido corto «Taboulé» y ahora ha regresado a este municipio medieval para disfrutar de este taller, para el que ha tenido que ser seleccionado entre más de doscientos talentos europeos.
En total han sido ocho los cineastas que han podido contar con el asesoramiento de profesionales del sector, que les han señalado los puntos débiles y los aciertos de sus textos.
«Hemos estado trabajando durante cuatro días con dos tutores del Sundance en nuestros guiones de largometraje. Ha sido como un ambiente de comunidad, sesiones en grupo, y después hemos estudiado cada guión en un trabajo muy minucioso e individualmente», explicó García a Efe.
Entusiasmado, subrayó que este será su primer texto original para largometraje y es que en el pasado ha realizado adaptaciones como «Caperucita en Manhattan» (1999), de Carmen Martín Gaite, o la adaptación de la obra teatral «Dentro de la Tierra» (2008), de Paco Bezerra.
El guión sobre el que ha trabajado en Capalbio se titula «Italo Disco», nombre de un subgénero musical de la década de los setenta y que ahora este cineasta emplea para coronar su historia sobre la homosexualidad en la tercera edad y la problemática que la rodea.
Ideada como una «dramedia» (drama y comedia), García narra «la historia de amor de dos hombres en una residencia de ancianos», donde sufren el rechazo del resto de residentes.
Thomas, tras la pérdida de su pareja, permanece en la residencia en medio del desdén del resto y escuchando la música de «Italo Disco», que representa «la época más feliz de sus vidas».
La situación de Thomas da un giro ante la llegada de un nuevo residente con quien deberá compartir habitación, Gonzalo Ferrer, heterosexual de 72 años que verá en el caso de su compañero una causa a defender.
«Digamos que traslado el acoso en los institutos a una residencia de ancianos. Es algo que casi no se ha tocado, pero que existe. El rechazo entre los ancianos a los ancianos gais y lesbianas. Estamos acostumbrados a ver a los ancianos como gente adorable, pero también pueden ser muy crueles», dijo.
La historia para García «va un poco sobre romper las normas», ya que, al final, se recurre a una «actitud rebelde, más relacionada con la juventud que con la tercera edad».
En un par de meses estará ya disponible la segunda versión del guión que es, apuntó, «la que se empieza a mover» por diferentes puntos del sector, y García prevé su presencia en el foro de coproducción de la X edición de la Fiesta del Cine de Roma, en octubre.
Será la hora de «buscar financiación» y, para ello, el cineasta apuesta por la coproducción con países de América Latina a través del Espacio Audiovisual Iberoamericano (Ibermedia) o con Estados europeos para «levantar un proyecto».
García fue finalista con «Taboulé» en la sección de cortos en los Premios Goya de 2012 y en el Festival «New Directors/New Films» que organizan el MoMa de Nueva York y la Film Society Lincoln Center.
Con esta misma historia, que retrata la confianza y el amor entre dos obreros que se ponen a prueba en una azotea, ganó en 2012 el Festival de Capalbio, un evento en el que concurren cortometrajes de todo el planeta.
Los organizadores de este certamen italiano explican que la edición de este año, la vigésimo segunda, se ha centrado en las generaciones de la era digital que, gracias al empleo de las nuevas tecnologías, producen una cantidad enorme de historias y narraciones. EFE
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