El obispo auxiliar de Portoviejo, Monseñor Eduardo Castillo Pino, ha sido nombrado Administrador Apostólico de esa Arquidiócesis, por el Papa Francisco, tras aceptar la renuncia de Monseñor Lorenzo Voltorini, según ha anunciado esta mañana la Conferencia Episcopal.
Monseñor Castillo, de 48 años, es guayaquileño, graduado en el colegio Javier. Doctor en Teología por la Universidad Pontificia de la Santa Cruz, de Roma, dirigida por el Opus Dei, fue ordenado sacerdote en 1994. Ha sido director de estudios del Seminario Mayor de Guayaquil, profesor de la Escuela de Teología para Laicos de esa archidiócesis, párroco y vicario episcopal de la Vicaría de Santa Elena, en la provincia de Guayas, en la arquidiócesis de Guayaquil.