El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, denunció este miércoles en el conflictivo puerto marítimo de Tumaco que la guerrilla de las FARC se ha propuesto generar caos en el país con la infiltración de la protesta social.
Santos sostuvo que se trata de una estrategia que se ha hecho evidente por «fuentes humanas», información encontrada en computadores decomisados a insurgentes y testimonios de desertores.
«Sabemos muy bien que la estrategia de las FARC va a ser la de estimular la protesta social y la de infiltrar esa protesta social para producir violencia, producir caos», sostuvo el gobernante durante un acto público en Tumaco (suroeste), que es el segundo puerto en importancia del país sobre las costas del océano Pacífico.
El presidente no ofreció detalles del supuesto plan rebelde de infiltración, pero mostró como ejemplo unos desórdenes que se registraron la semana pasada en las inmediaciones de una universidad pública de la capital colombiana.
La protesta fue atribuida a estudiantes de la Universidad Distrital «Francisco José de Caldas», que mantuvieron cortado varias horas el tráfico por una importante avenida de los cerros del este de Bogotá y se enfrentaron a la fuerza pública con pequeños artefactos explosivos de fabricación artesanal.
Sin hacer mención a ningún grupo, Santos advirtió que «la capacidad que tenían de producir ‘papas bombas’ y todo lo que se descubrió después, muestra claramente, clarísimamente la manipulación y la infiltración de quienes saben qué es lo que quieren y qué es lo que buscan».
«Las vías de hecho no las vamos a tolerar», notificó el presidente, para afirmar: «Protestas sí, vías de hecho no».
El gobernante habló de la supuesta infiltración rebelde en las protestas, que no es la primera vez que se denuncia en el país, durante el acto de activación de una nueva brigada de la Armada Nacional con alcance sobre todo el Pacífico Sur del país.
La unidad, con sede en Tumaco, tiene como área de operaciones una línea costera entre Punta Coco, en el departamento del Cauca y el río Mataje, en la vecina región de Nariño y que marca la frontera sur con Ecuador.
Es un territorio de litoral que comprende nueve municipios y 73 caseríos, así como tres islas, y estará a cargo de 2.500 uniformados, entre oficiales, suboficiales e infantes de marina, al mando del coronel Carlos Armando Castillo.
Un total de 17 ríos son responsabilidad de esta nueva brigada, que cuenta con 16 embarcaciones, incluidas patrulleras, elementos de combate fluvial y estaciones de apoyo móviles.
Santos dijo que el pie de fuerza policial de Tumaco también será ampliado, con 380 uniformados, entre ellos de carabineros y de comandos de élite.
«Hoy no solamente estamos fortaleciendo toda la presencia de infantería de Marina y toda la presencia de la fuerza pública en los esteros y en la parte del mar y de los ríos, sino también la presencia de la Policía», señaló Santos.
La región es la más conflictiva de la actualidad en Colombia por efecto de la actividad de grupos armados ilegales y de delincuencia de toda índole, desde las guerrillas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y Ejército de Liberación Nacional (ELN), hasta nuevas bandas paramilitares promovidas por narcotraficantes.
La línea costera del Pacífico Sur es también la más importante salida de cocaína con destino Estados Unidos, mediante rutas que tienen como puente Centroamérica y México. EFE