PASADENA, California, EE.UU. (AP) — El Desfile de las Rosas trajo el lunes sus carros alegóricos y sus impresionantes bandas musicales y estuvo liderado por el mariscal J.R. Martínez, pero también llegó con un grupo totalmente nuevo de participantes: los manifestantes contra Wall Street.
El 123 desfile de Año Nuevo se aplazó un día para celebrarse el lunes y su tema era «Tan sólo imagina». Las flores inundaron el centro de Pasadena y estuvieron acompañadas por los vítores de miles de espectadores.
Se estima que 40 millones de personas vieron el desfile por televisión, el cual contó con 44 carros alegóricos, 16 bandas y 22 grupos ecuestres.
La edición de este año contó con la presencia del veterano de guerra de Irak J.R. Martinez quien fue el mariscal de los carros y las bandas. Martínez, cuya madre es salvadoreña, quedó desfigurado tras su servicio en la guerra, pero se volvió una fuente de inspiración cuando participó en el concurso de baile Dancing with the Stars.
También estuvieron presentes los hijos y nietos del actor Roy Rogers, en un carro que conmemoraba a los vaqueros y los padres de Christina-Taylor Green, la niña de 9 años que murió en la masacre en la que fue herida la representante Gabrielle Giffords. Los padres de la pequeña recorrieron el desfile en un carro para apoyar la donación de órganos pues regalaron las corneas de su hija después de su trágica muerte.
Hubo 10 arrestos durante la noche, incluyendo cuatro por delitos graves, cuando los espectadores llegaron para ganar el mejor lugar en la ruta del desfile, sin embargo el número de arrestos fue menor al año pasado.
Pero en general «todo salió muy bien, muy bien, estamos muy conformes», dijo el jefe de la policía Phlunte Riddle.
Justo detrás del desfile llegaron los manifestantes contra Wall Street en una protesta organizada.
La música de las bandas todavía se alcanzaba a oír cuando las consignas de «¡Los bancos fueron rescatados, a nosotros nos vendieron!» se escucharon en voz de los manifestantes de Ocupemos el Desfile de las Rosas que marcharon cerca de 2,4 kilómetros (1,5 millas) de la ruta de 8,8 kilómetros (5,5 millas) de largo, antes de desviarse para una manifestación cerca del ayuntamiento.
«Esto es para quitarle dinero a los políticos», dijo Greg Stevens, un profesor de salud pública de la Universidad del Sur de California. «Apoyo todo de lo que se trata este movimiento».
El desfile del 2012 fue el primero en 25 años en el que no participaron los percherones de Anheuser-Busch Clydesdale pues la compañía se retiró por una campaña publicitaria.