Miles de personas se manifestaron hoy en Brasil, Chile y Uruguay para pedir a las autoridades brasileñas que den pasos en favor de la legalización de la marihuana.
En Río de Janeiro, los manifestantes, convocados por el colectivo «Marcha de la marihuana», avanzaron por la popular playa de Ipanema, en la zona sur de la ciudad, ataviados con réplicas en cartón de la popular hoja de cannabis sativa.
Una fuente de la Policía Militar, consultada por Efe, calculó en 2.000 el número de personas adheridas a la multitudinaria protesta.
Sin embargo, el abogado André Barros, miembro del colectivo, situó entre 5.000 y 10.000 la cifra de participantes en el acto, que se desarrolló en ambiente festivo y contó con el apoyo de una banda de música.
El inicio de la marcha estaba previsto para las 16.20 de la tarde, un momento de valor simbólico para los consumidores de cannabis que consideran que esa es la mejor hora para el consumo de marihuana.
Los manifestantes piden al Supremo Tribunal Federal de Brasil (STF) que que declare inconstitucional el artículo de la Ley de Tóxicos que tipifica como delito el cultivo y posesión de la citada sustancia.
Para Álvaro Americo, político municipal de Río de Janeiro, es positiva la legalización de la sustancia con fines medicinales para combatir los efectos de enfermedades como el Alzheimer o el cáncer.
Mientras, Camila, estudiante universitaria, explicó a Efe que defiende la legalización de la marihuana como la mejor fórmula para acabar con la violencia que causa en zonas deprimidas el control del tráfico ilegal.
Desde que el STF autorizó la convocatoria de manifestaciones para exigir la legalización de la citada hierba, el colectivo «Marcha de la Marihuana» ha organizado abundantes actos de protesta para llamar la atención de las autoridades y la población.
Cultivadores de marihuana piden al Parlamento «último paso» para legalización
Cultivadores de marihuana y consumidores de cannabis uruguayos marcharon hoy por Montevideo para pedirle al Parlamento que dé «el último paso» que falta en el país para legalizar su práctica y desarrolle de una vez el proyecto de ley en ese sentido que ingresó al legislativo el año pasado.
Unas 300 personas, en su mayoría jóvenes, se congregaron en medio de un ambiente festivo en el centro de la capital uruguaya y mientras fumaban sin ningún tapujo sus cigarrillos de marihuana se dirigieron a la sede del Poder Legislativo con motivo del día de la marcha mundial por la despenalización, con el principal objetivo de exigir una rápido trámite al proyecto que habilitaría legalmente el cultivo de cannabis.
Según explicó a Efe Juan Vaz, uno de los organizadores de la marcha, la práctica social en Uruguay ya permite el consumo y la plantación de la famosa mata, si bien aún existen «incertidumbres» al quedar en manos de los jueces determinar qué cantidades se pueden portar y plantar y cuáles no.
«El proyecto de ley que está en el Parlamento desde el año pasado y que fue presentado por diputados de tres partidos políticos distintos señala cuántas plantas se pueden plantar y cuánta marihuana se considera legal, pero pese a su apoyo quedó relegado. Lo que queremos es que lo discutan ya», indicó Vaz.
Para el activista, en Uruguay está claro que «social y culturalmente» la población está a favor de despenalizar el cultivo de marihuana y su consumo, y que ya «fumar un porro en Montevideo es algo normal y la policía mira a otro lado», por lo que ya llegó la hora de «discriminalizar al usuario» y permitir un «abastecimiento regulado y desvinculado de las redes criminales».
«Todo el mundo ya ha reconocido que la guerra contra el narcotráfico no funciona. Hay una tendencia mundial para cambiar de paradigma. El cultivo personal ya funciona de hecho, pero nos gustaría que se normalizara», apuntó.
En ese sentido, Vaz destacó que el Estado uruguayo malgasta recursos en perseguir, aunque solo sea nominalmente, a personas que no representan ningún riesgo para la sociedad, como fue el caso de la escritora argentina Alicia Castilla, de más de 60 años y que pasó varias semanas en prisión el año pasado en Uruguay por cultivar marihuana en su casa.
Para los organizadores, la posibilidad de que se legalice el cultivo y los clubes de cannabis para uso personal es «una oportunidad histórica para que el Uruguay abra camino en la búsqueda de modelos de regulación de drogas alternativos al prohibicionismo».
Unas 20.000 personas marchan en Santiago de Chile en favor de la marihuana
Unas 20.000 personas se reunieron en la tarde del sábado en el Parque Almagro de la capital chilena en defensa de la marihuana, por una despenalización de la producción de la droga y por una política acorde a los tiempos actuales.
En el marco de la «Global Marihuana March», que se realiza el primer sábado de mayo desde hace ocho años en todo el mundo, los chilenos se manifestaron primero en la Plaza Los Héroes, muy cerca de la sede del Ejecutivo, y de allí marcharon unas ocho manzanas hasta el Parque Almagro.
«Esta es una manifestación de carácter pacífico, festivo y familiar, y tiene por objeto instalar en la agenda pública la idea de un debate abierto y democrático para generar una nueva política de drogas», señaló Nicolás Espinoza, coordinador del movimiento Movimental.
En declaraciones a Efe, Espinoza dijo que la idea de esta reunión es que las autoridades dejen de «criminalizar» a los usuarios de lamarihuana «y se den cuenta que las personas utilizan la cannabis en forma recreacional».
«Es una planta muy noble con el medioambiente, se utilizó en su momento de manera industrial en la fabricación de cuerdas, papel y ropa, pero posteriormente se prohibió su cultivo. Es algo que debemos cambiar, es hora de que se abran las mentes», añadió.
Indicó que la marihuana se utiliza en variados usos paliativos de diversas enfermedades como el glaucoma, el VIH positivo, para evitar los efectos secundarios de la quimioterapia y en muchas otras, «por lo que las personas que las necesitan tienen todo el derecho a cultivarlas», apostilló.
En tanto, en la ciudad de Valparaíso, a 120 kilómetros al oeste de Santiago, unas 200 personas se reunieron en la Plaza Echaurren también en favor de la despenalización del cultivo de la marihuana.
La Cannabis sativa (cáñamo o marihuana), es una especie herbácea de la familia Cannabaceae, con propiedades psicoactivas y originaria de las cordilleras del Himalaya. Aparte de sus propiedades medicinales, el aceite de sus semillas se puede utilizar como combustible.