El Gobierno argentino negó que varios presos hayan salido en los últimos meses durante unas horas de las cárceles para participar de actos políticos organizados por agrupaciones oficialistas.
«Es un disparate suponer que se lleve a los presos a un acto político», sostuvo el ministro argentino de Justicia, Julio Alak, en declaraciones difundidas hoy por el periódico Tiempo Argentino.
Ayer, el diario Clarín indicó que varios presos detenidos en cárceles federales de Argentina fueron liberados durante horas en los últimos meses «para participar en eventos políticos disfrazados de actividades culturales», organizados por la agrupación Vatayón Militante, afín al Gobierno de Cristina Fernández.
Alak dijo que los presos realizan salidas autorizadas por la Justicia para participar de actividades de reintegración social, pero aseguró que «de ninguna manera fue un reclutamiento político».
«El trabajo que se hace dentro de las cárceles que dependen del Servicio Penitenciario Federal está en sintonía con las políticas de inclusión social que lleva adelante el Gobierno nacional», argumentó el ministro.
El diario indicó además que hubo al menos dos salidas del penal de Eduardo Vázquez, el exbaterista del grupo argentino Callejeros, condenado a 18 años de cárcel por el asesinato de su esposa, Wanda Taddei, a la que quemó viva, según la sentencia.
La primera salida de Vázquez fue en noviembre de 2011, cuando participó en un evento de Vatayón Militante en un local del barrio porteño de Chacarita, aparentemente sin la obligatoria autorización judicial, según el periódico.
La segunda salida del músico ocurrió el pasado 24 de junio, diez días después de ser condenado por homicidio, cuando tocó timbales junto a otros reclusos en un acto de la misma agrupación en el barrio porteño de San Telmo.
«El primer disparate es que Vázquez salió sin autorización. El Servicio Penitenciario no autoriza salidas» sin orden judicial, refutó Alak.
Las salidas de los presos están previstas y reglamentadas en la ley 24.660 que establece que, salvo en casos de extrema urgencia, siempre deben estar autorizadas por la Justicia. EFE