La joven marroquí Karima El Marough, conocida como Ruby, será llamada como testigo por la defensa del ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi en el proceso por el caso que lleva el nombre de ella y en el que el empresario está acusado de inducción a la prostitución y abuso de poder.
Los abogados de Berlusconi confirmaron durante la audiencia de hoy que la joven será convocada para la vista del 10 o del 17 de noviembre, después de que la acusación renunciara a interrogarla.
Por otro lado, al Tribunal de Milán, donde se desarrolla el juicio, acudieron hoy a testificar las exministras Mara Carfagna y Maria Stella Gelmini, que pertenecen al partido Pueblo de la Libertad de Berlusconi.
A la salida del Tribunal, Carfagna explicó a los periodistas el contenido de su declaración, en la que aseguró que nunca conoció a Ruby y que jamás estuvo en Arcore, la residencia que Berlusconi tiene cerca de Milán y en la que se celebraron fiestas supuestamente subidas de tono y con la participación de menores.
«El 14 de febrero de 2010 me encontraba en medio de una campaña electoral bastante intensa, en Nápoles y Salerno (sur de Italia), al igual que el 2 y el 9 de marzo», afirmó Carfagna, con lo que descartaba haber estado en Arcore los días en los que Ruby participó en esos encuentros celebrados por Berlusconi.
Gelmini, por su parte, aseguró haber estado en algunas cenas en Arcore, aunque siempre por motivos de trabajo y en encuentros relacionados con la actividad política.
También testimonió la «vedette» Miriam Loddo, quien ha confirmado que sigue recibiendo 2.500 euros mensuales de Berlusconi, como ya hicieron otras jóvenes en la precedente audiencia.
El escándalo Ruby salió a la luz en octubre de 2010, cuando la prensa informó de que Berlusconi había llamado seis meses antes a una comisaría de Milán para interceder ante las autoridades para que liberaran a Ruby, entonces menor de edad, alegando que era la sobrina del expresidente egipcio, Hosni Mubarak.
Ruby, que se encontraba retenida en la comisaría por un robo de 3.000 euros a una amiga, fue liberada y entregada a la consejera regional de Lombardía, Nicole Minetti, considerada por la Fiscalía como una de las personas que facilitaban chicas a Berlusconi.
Unos meses después, el 14 de enero de 2011, el diario «Corriere della Sera» publicó que Berlusconi estaba bajo investigación por un supuesto delito de abuso de poder sobre un funcionario de dicha comisaría por esa llamada que liberó a Ruby.
En cuanto a la incitación a la prostitución de menores, el supuesto delito consiste en la presencia de la joven en la mansión de Berlusconi de Arcore en ocho ocasiones, en las que la Fiscalía cree que hubo encuentros sexuales con el mandatario cuando Ruby aún no había cumplido los 18 años. EFE