BELÉN, Cisjordania (AP) — Cuando el papa Francisco se dirigía a dar una misa en Belén el domingo, hizo una sorpresiva parada en el muro que separa a Cisjordania de Israel.
Fotógrafos y testigos se apresuraron para ver al pontífice cerrar los ojos y rezar ante el muro. Sólo algunos guardaespaldas permanecieron alrededor del papa, mientras él ponía su mano derecha sobre la barrera de concreto, directamente debajo de una torre de vigilancia.
Francisco cerró sus ojos para meditar. Por unos momentos recargó su frente contra una pared repleta de grafitis y mensajes de «Palestina libre«. Cuando terminó, se persignó lentamente y se alejó caminando.
Israel dice que la enorme barrera de concreto es necesaria por su seguridad, mientras que los palestinos dicen que sofoca la vida en Belén y ha devorado tierra de Cisjordania.
La visita de Francisco tiene importancia simbólica, porque ocurrió poco tiempo después de que se rompieran las negociaciones de paz entre palestinos e israelíes que impulsaba Estados Unidos.
Francisco también invitó a los presidentes palestino e israelí al Vaticano en junio para rezar por la paz, una invitación que ambos aceptaron.
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El papa Francisco reza frente al muro de separación israelí antes de dar una misa en la plaza Manger, cerca de la Iglesia de la Natividad donde se cree que nació Jesús, en Belén, el 25 de mayo de 2014. (Foto AP/Ariel Schalit)
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