Ammán, 5 nov (EFE).- Jordania revisará todos sus lazos bilaterales con Israel, «incluido el acuerdo de paz» firmado en 1994, en protesta por los recientes incidentes en la mezquita de Al Aqsa, en Jerusalén, dijo hoy el portavoz del Gobierno jordano, Mohamed Momani.
«Están abiertas todas las opciones legales y diplomáticas en respuesta a las violaciones de la mezquita de Al Aqsa», apuntó Momani en un comunicado.
El portavoz señaló que Jordania «ha desarrollado un plan integral para ocuparse de las violaciones israelíes contra los lugares sagrados de Jerusalén».
«Desde esta mañana hemos estado siguiendo la toma del complejo de Al Aqsa por más de 200 elementos de seguridad israelíes, además de colonos y miembros del Knesset (Parlamento israelí). Este comportamiento es inaceptable para nosotros», subrayó el portavoz.
Bajo el tratado de paz de 1994 entre Jordania e Israel, Tel Aviv reconoce el derecho de Ammán de proteger los lugares santos islámicos y cristianos de Jerusalén Este, ocupado por Israel desde la guerra de 1967.
Las declaraciones de Momani tienen lugar horas después de que el primer ministro jordano, Abdalá Ensur, ordenara a su ministro de Asuntos Exteriores, Naser Yudeh, que llamase a consultas al embajador jordano en Israel, Walid Obeidat.
Según un comunicado difundido en la agencia oficial jordana de noticias, Petra, el jefe del Gobierno jordano tomó esta medida en protesta por la «escalada sin precedentes de las violaciones» contra la mezquita de Al Aqsa en Jerusalén.
Ensur también ha pedido a Yudeh que presente «una queja inmediata» ante el Consejo de Seguridad de la ONU por las agresiones israelíes contra estos santuarios.
Esa decisión coincide con los planes de unos catorce diputados jordanos de viajar a Jerusalén y defender la mezquita de Al Aqsa, la tercera en importancia en la jerarquía del islam, según fuentes parlamentarias.
En esta jornada se registraron enfrentamientos entre policías israelíes y manifestantes palestinos, y los agentes irrumpieron en la Explanada de las Mezquita, donde se sitúa Al Aqsa.
El recinto ha quedado cerrado, después también de que decenas de judíos que exigían rezar en lo que denominan el «Monte del Templo» se congregasen en el portón exterior que da acceso al lugar.
Hace tres días, las autoridades reabrieron la Explanada a los visitantes judíos, lo que despertó la ira de los palestinos, tras la entrada de algunos políticos ultranacionalistas.
La disputada explanada es el epicentro de la lucha que israelíes y palestinos libran por Jerusalén, donde en los últimos meses se registran numerosos choques entre las fuerzas del orden y jóvenes palestinos. EFE