Costa Rica (AP) — La Corte Interamericana de Derechos Humanos notificó el jueves un fallo en el que condena a El Salvador por la desaparición de cuatro niños y una niña durante el conflicto armado que afectó a ese país en la década de 1980.
Según el fallo, el Estado salvadoreño es responsable de la desaparición de los menores José Adrián Rochac, Santos Ernesto Salinas, Emelinda Lorena Hernández, Manuel Antonio Bonilla y Ricardo Ayala entre 1980 y 1982.
Las desapariciones se dieron durante distintos operativos de la contrainsurgencia en el conflicto salvadoreño, y a criterio de la corte no son hechos aislados sino «que se insertan en el patrón sistemático estatal de desapariciones forzadas de niñas y niños, que se verificó durante el mencionado conflicto armado».
La CIDH señaló que en el caso prevalece una situación de «impunidad total» y no se ha satisfecho el derecho de los familiares de las víctimas a conocer la verdad, pese a que el Estado salvadoreño reconoció su responsabilidad y aceptó totalmente los hechos.
Durante el proceso de este juicio el Estado pidió perdón a los familiares de las víctimas, pues en el pasado las autoridades del país negaron lo ocurrido.
La Corte consideró que las desapariciones provocadas por agentes estatales aún afectan a los familiares de las víctimas al mantenerlos en la incertidumbre sobre el paradero de estos niños y, pese a que han transcurrido 30 años, los juicios penales continúan en sus primeras etapas, por lo que nadie ha sido declarado culpable.
Ante esta situación, la sentencia exige a El Salvador agilizar los procesos penales, realizar una «búsqueda seria» tendiente a determinar si las víctimas aún están vivas, brindar apoyo psicológico a las familias y construir un «jardín museo» para recordar a todos los niños desaparecidos durante el conflicto armado.