Miami (AP) — El ex juez de Venezuela Benny Palmeri Bacchi fue condenado el lunes a más de seis años de prisión en un caso de narcotráfico que involucró a funcionarios de alto rango del gobierno del fallecido presidente Hugo Chávez con un cartel colombiano.
En una breve audiencia realizada en los tribunales federales de Miami, la jueza Ursula Ungaro sentenció a Palmeri a 80 meses de prisión por los cargos de asociación ilícita para obstruir la justicia, lavado de dinero y extorsión. La condena incluye también tres años de libertad supervisada una vez que salga de la cárcel.
El ex juez de 46 años, quien fue detenido en el aeropuerto internacional de Miami en julio de 2014 cuando llegaba con su familia para pasar unas vacaciones en Disney World, se declaró culpable de esas acusaciones en noviembre, como parte de un acuerdo que selló con la fiscalía federal.
La sentencia fue casi un año más larga que la recomendada por los fiscales federales pero menor a la sentencia máxima de 20 años de prisión que enfrentaba Palmeri.
La jueza Ungaro dijo que era necesaria para reflejar la gravedad de los delitos.
«Esta conducta es realmente grave», dijo Ungaro. «Estamos hablando de narcotráfico en los niveles más altos y de corrupción pública».
Los fiscales alegan que Palmeri se asoció ilegalmente con el ex director de la Interpol en Venezuela, Rodolfo McTurk, para ayudar a traficar cocaína colombiana a través de Venezuela a Estados Unidos. McTurk también fue acusado, pero está en Venezuela.
En el caso aparece también acusado Hugo Carvajal, un ex jefe de inteligencia militar venezolana cercano a Chávez que fue detenido en Aruba bajo una orden de arresto emitida en Estados Unidos. Carvajal, sin embargo, fue liberado tras gestiones de Venezuela.
Vestido con traje de presidiario de camisola y pantalón beige, Palmeri escuchó la sentencia sentado junto a sus abogados. Permaneció serio y con auriculares para entender la traducción al español de la audiencia que se realizaba en inglés.
«La verdad es que estoy profundamente arrepentido. Pido piedad, misericordia», expresó Palmeri en español tras pedir perdón a Dios y a su familia. «Ofrezco ayudar con lo que sea para que todo sea esclarecido», dijo.
Al declararse culpable en noviembre, el ex juez selló un acuerdo con la fiscalía en busca de obtener una condena leve. A través de ese pacto, las autoridades se comprometieron a retirarle uno de los cargos que enfrentaba y Palmeri prometió cooperar con testimonios y documentos.
Entre los narcotraficantes que Palmeri admitió haber protegido figura Jaime Alberto «Beto» Marin-Zamora, uno de los líderes del cartel colombiano del Norte del Valle extraditado en 2010 a Estados Unidos, quien cumple una condena a 16 años de prisión.
Según el acuerdo de culpabilidad, el ex juez admitió haber ayudado a Marin, al menos temporalmente, a evadir a las autoridades de Estados Unidos acusándolo falsamente en Venezuela. De esta forma las autoridades venezolanas no tendrían excusas para enviar a Marin a Estados Unidos, de acuerdo con los documentos.
Por esto Palmeri habría recibido una recompensa de 1,5 millón de dólares. Agentes de la agencia antinarcóticos, conocida como DEA, dijeron que al menos parte de ese dinero fue transferido a bancos del sur de Florida a través de Curacao.