Buenos Aires, 2 mar (EFE).- El Gobierno argentino aseguró hoy que no hay archivos secretos sobre el atentado contra la mutual judía AMIA y criticó que la oposición mostrara carteles que pedían la apertura de los archivos durante el discurso pronunciado ayer por Cristina Fernández para abrir el curso legislativo en el Congreso.
«No hay archivo que no se haya abierto», dijo hoy el jefe del Gabinete de ministros, Aníbal Fernández, en declaraciones a los medios, en referencia a la investigación del atentado contra la entidad judía, que causó 85 muertes en Buenos Aires en 1994.
El jefe de ministros cargó contra los legisladores opositores que este domingo exhibieron carteles en el Congreso en reclamo de la apertura de los archivos de la causa AMIA y de la creación de una comisión investigadora sobre el ataque, que en su opinión buscaban perjudicar a la presidenta Cristina Fernández.
La exhibición de los mensajes en medio del largo discurso de Fernández desataron una airada respuesta por parte de la mandataria, quien cambió el tono para recalcar: «No necesito carteles, de la AMIA hablo desde 1994».
«Creyeron que la iban a correr con un cartelito (sic)», apuntó hoy Aníbal Fernández, antes de insistir en que quien considere que hay algún archivo que deba abrirse «que haga las presentaciones judiciales y se presente de oficio en la casa de Gobierno, que la presidenta lo va a abrir».
«Conozco el tema de sobra. Me tocó firmar los decretos para autorizar que se abran los archivos. ¿Le parece poco lo que ha hecho (el Gobierno)?», señaló el funcionario.
En ese sentido, recordó que después de que el exjefe de operaciones de la Secretaría de Inteligencia Antonio «Jaime» Stiuso fuera relevado de su cargo el pasado diciembre, se hicieron públicos archivos relativos a sus 42 años de su vida como espía gracias a una orden del Ejecutivo para levantar la orden de secreto.
El atentado contra la AMIA ha vuelto al centro de la escena política tras la muerte en circunstancias aún no aclaradas del fiscal especial encargado de la investigación, Alberto Nisman, encontrado en su vivienda con un tiro en la cabeza el 18 de enero pasado.
Cuatro días antes, Nisman había presentado una denuncia contra la presidenta, el canciller Héctor Timerman y varios dirigentes oficialistas por un presunto plan para encubrir a los sospechosos iraníes del atentado.
La denuncia fue desestimada el pasado jueves por el magistrado Daniel Rafecas, por considerar que no existen pruebas que sustenten las acusaciones. EFE