Cuba y Noruega, los países garantes de los diálogos de paz colombianos, y Venezuela y Chile como acompañantes, instaron hoy al Gobierno de Juan Manuel Santos y a las FARC al «desescalamiento urgente del conflicto armado» y les pidieron medidas «de construcción de confianza».
«Instamos a las partes a restringir al máximo las acciones de todo tipo que causan víctimas y sufrimiento en Colombia», dicen los garantes del proceso de paz en una declaración leída a los periodistas en La Habana por el representante de Cuba, Rodolfo Benítez, acompañado por la de Noruega, Idun Aarak Tvedt.
Los garantes y acompañantes del proceso de paz consideran que «esos pasos son imprescindibles para garantizar las condiciones y el clima propicio que permitan lograr acuerdos sobre las cuestiones pendientes de la agenda de conversaciones, incluyendo la adopción de un acuerdo de cese al fuego y de hostilidades bilateral y definitivo y lo referido a los derechos de las víctimas».
En su mensaje, Cuba, Noruega, Venezuela y Chile reafirmaron su compromiso de continuar contribuyendo al avance de las conversaciones y la adopción a corto plazo de un acuerdo final para la terminación del conflicto y la construcción de una paz «estable y duradera» en Colombia.
Tras ese comunicado, los negociadores de las FARC aseguraron que «desean firmar la paz» con el Gobierno, en la habitual declaración que hacen diariamente antes de empezar una nueva jornada de conversaciones.
En su mensaje de hoy, la guerrilla se refirió a las recientes declaraciones del jefe negociador del Gobierno colombiano, Humberto de la Calle, quien este fin de semana dijo en una entrevista que el proceso de paz pasa actualmente por su «peor momento».
«No queremos hoy darle espacio a las voces agoreras del fracaso de los diálogos, ni a la desmesura de las palabras de quienes teniendo en sus manos la sagrada responsabilidad de construir la paz, flaquean frente a las adversidades, usan tonos de ultimátum y amenazan con abandonar la búsqueda de la reconciliación», aseveró el número dos de las FARC, «Iván Márquez» (alias de Luciano Marín Arango), quien leyó el comunicado de la guerrilla.
Agregó que ambas partes deben «cuidar este proceso como la niña de los ojos».
«Despotricar de la contraparte, como se ha hecho en estos días, es una forma de debilitar la esperanza y la credibilidad en el proceso», aseveró la guerrilla, que recordó los tres acuerdos parciales alcanzados desde que los diálogos de paz comenzaron a finales del año 2012.
Gobierno y guerrilla celebran actualmente el ciclo 38 de sus diálogos de paz, con sede permanente en La Habana, pendientes de concretar un acuerdo sobre el tema de la reparación a las víctimas del conflicto. EFE (I)