El ejército kurdo asedia Sinyar en su camino hacia Mosul

Foto tomada del portal www.cnbc.com

Más de 7.500 soldados kurdos y milicianos yazidíes irrumpieron hoy en la localidad de Sinyar, en el norte de Irak, en una ofensiva para liberarla del grupo yihadista Estado Islámico (EI) y como preludio para recuperar la ciudad de Mosul, su principal feudo en Irak.

Fuentes kurdas próximas a los combates dijeron a Efe que otros 12.500 «peshmergas» (combatientes kurdos) y milicianos yazidíes apoyan la ofensiva desde las montañas que rodean Sinyar.

Horas antes, la coalición internacional liderada por Estados Unidos llevó a cabo varios bombardeos aéreos contra más de setenta posiciones de los yihadistas en la zona, con el objetivo de allanar el terreno al ejército kurdo y los milicianos, informó a Efe el gobernador de Sinyar, Mohamed Jalil.

La ofensiva fue lanzada desde tres frentes – norte, este y oeste- en diferentes momentos.

Primero, el ataque fue llevado a cabo desde el norte, junto a la ladera de las montañas de Sinyar, con fuerzas de infantería.

En la zona del este, decenas de combatientes pudieron infiltrarse en los barrios orientales de la ciudad.

Finalmente, desde el oeste, otra fuerza logró alcanzar el centro de la ciudad, en medio del estallido de violentos enfrentamientos en los barrios residenciales.

Antes de la ofensiva, se llevaron a cabo bombardeos aéreos y de artillería con el objetivo de limpiar un gran número de caminos minados y zonas donde los yihadistas colocaron explosivos.

En los ataques por tierra se utilizaron también vehículos blindados, algunos de ellos pertenecientes a la coalición internacional, según un comunicado del Consejo de Seguridad de la región del Kurdistán.

Por su parte, una fuente de seguridad kurda dijo a Efe que la campaña, bautizada como «Liberación de Sinyar», cuenta con la supervisión directa del presidente de la región autónoma del Kurdistán iraquí, Masud Barzani.

El líder del octavo regimiento de las fuerzas kurdas, Luqman Kuli, dijo a Efe que los avances por el norte, este y oeste de la ciudad fueron rápidos, debido a la huida de los yihadistas.

Además, añadió que los «peshmergas» lograron bloquear los diferentes accesos a Sinyar, después de que llegaran también a la zona sur, a través de la creación de un frente meridional para defender las zonas exteriores y otro alrededor de la ciudad para impedir la huida de los yihadistas.

Kuli explicó también que decenas de cadáveres de los extremistas están desperdigados por Sinyar y añadió que las fuerzas kurdas destruyeron varios coches bomba que el EI había utilizado para atacarles, antes de que estos explotaran.

El dirigente del Partido Democrático del Kurdistán, Mohidín al Mazuri, dijo a Efe que 63 miembros del EI murieron durante los ataques.

La ofensiva sobre Sinyar podría ser el primer paso efectivo de las fuerzas kurdas en su intento por recuperar Mosul, segunda ciudad del país y principal bastión del EI en Irak.

Así lo ha asegurado el gobernador de la provincia de Mosul, Nofel Hamadi Akup, en declaraciones a la televisión kurda Rudaw, que afirmó que el dirigente considera la batalla de Sinyar como «el primer paso» hacia la recuperación de Mosul, «donde cientos de miles de civiles viven en cautividad».

Por otra parte, las fuerzas del Ejército del Gobierno central iraquí tratan desde hace meses de recuperar terreno en la provincia occidental de Al Anbar, cuya capital Ramadi fue asediada por los yihadistas en mayo pasado.

El EI ocupó Sinyar el pasado 3 de agosto de 2014 y desde entonces, miles de personas se han visto obligadas a abandonar sus hogares y a huir, y otras tantas han sido objeto de secuestros, asesinatos y ataques.

Según dijo hoy a Efe la activista yazidí Kaua Aido Jatari, la ocupación de Sinyar ha causado desde entonces 450.000 desplazados, 6.500 secuestrados, 2.080 muertos y 950 heridos.

Además, se han localizado once fosas comunes con restos de cientos de personas asesinadas y se han destruido once santuarios yazidíes, añadió Jatari.

Antes de la llegada de los extremistas, la localidad de Sinyar estaba habitada en un 75 por ciento por yazidíes, una minoría de etnia kurda y cuya religión está basada en el zoroastrismo, lo que motivó la persecución por parte del EI, que los considera infieles.

El 10 de junio de 2014, el EI ocupó Mosul y amplias zonas del norte de Irak, y poco después, proclamó un califato en los territorios bajo su control en Irak y en la vecina Siria, donde impuso una interpretación radical de la ley islámica. EFE (I)

Más relacionadas