KABUL, Afganistán (AP) — Afganistán ahorcó el domingo a seis hombres condenados por terrorismo, mostrando una estrategia más dura contra los talibanes.
El presidente Ashraf Ghani «aprobó las ejecuciones de seis terroristas que cometieron graves crímenes contra los civiles y el personal de seguridad», indicó su oficina.
Se trata de las primeras ejecuciones aprobadas por Ghani desde que asumió la presidencia en 2014 con la promesa de que pondría fin a la guerra. Sus esfuerzos de reavivar las conversaciones de paz con los talibanes han fracasado, y los combates han aumentado.
El mes pasado, 64 personas murieron en un atentado suicida en Kabul. Los talibanes reclamaron el ataque, uno de los más mortales desde que la invasión liderada por Estados Unidos en 2001 expulsó al grupo extremista del poder.
Poco después, Ghani prometió en un discurso ante el Parlamento «tratar con severidad a los que derraman la sangre de nuestros inocentes y soldados» y «no tener piedad para castigarlos».
El portavoz presidencial Dawa Khan Menapal informó que los ejecutados participaron en ataques de alto perfil, incluyendo el asesinato en 2011 de Burhanuddin Rabbani, ex presidente y el jefe del Consejo Superior de la Paz, y de un ataque a un supermercado de Kabul que dejó ocho muertos ese año. Todos fueron acusados y juzgados de acuerdo con la ley, agregó.
Las ejecuciones «cambiarán el comportamiento de otros terroristas,» dijo el analista independiente Maulana Farid, «porque ahora saben que si son atrapados se enfrentarán el mismo destino».
El Talibán dijo a principios de este año que no participaría en un diálogo directo con el gobierno de Kabul, arruinando las esperanzas de reactivar un proceso de paz iniciado el año pasado. Funcionarios afganos y estadounidenses esperan una lucha feroz durante todo el verano, ya que los talibanes parecen estar a la ofensiva. (I)
The Associated Press