BUCAREST (AP) — Los rumanos votaron en elecciones parlamentarias el domingo, un año después de que una campaña contra la corrupción obligó al último primer ministro socialista a renunciar.
El país de 19 millones de habitantes es uno de los más pobres de la Unión Europea y considerado uno de los más corruptos.
Se prevé que el Partido Socialdemócrata, el más grande del país, será el más votado y probablemente tratará de formar una coalición con partidos menores. Están en juego 504 bancas en el parlamento bicameral.
El presidente Klaus Iohannis, quien por ley no puede estar afiliado a un partido, exhortó a los ciudadanos a que voten.
«Yo voté por una Rumania próspera y fuerte», dijo Iohannis el domingo después de votar en Bucarest, la capital.
Se estimaba una concurrencia a las urnas del 20,2% en todo el país luego de siete horas, algo menor que en las elecciones parlamentarias de 2012.
El primer ministro Victor Ponta renunció luego de protestas masivas provocadas por el incendio de un club nocturno en 2015 en el que murieron 64 personas. El gobierno actual está en manos de tecnócratas encabezados por el premier Dacian Ciolos, un ex comisionado de agricultura de la UE.
El líder socialdemócrata Liviu Dragnea fue condenado a dos años de prisión en suspenso por fraude electoral en abril por inflar las cifras en un referendo en julio de 2012 para impugnar al entonces presidente Traian Basescu. Su partido impulsa una política populista.
«Voté para que los rumanos tengan más en los bolsillos, por el aumento de salarios y pensiones y la reducción de impuestos, por el apoyo a las empresas y a los jóvenes para que puedan adquirir vivienda», dijo Dragnea el domingo.
Los comicios cierran a las 9 de la noche (1900 GMT) y se esperan los primeros resultados para el lunes por la mañana.
(I)