Le Pen visita sorpresivamente misma fábrica que Macron y acaparó mayor atención

Marine Le Pen.

Francia (AP) — La candidata presidencial de ultraderecha Marine Le Pen eclipsó el miércoles a su oponente centrista Emmanuel Macron al aparecer sorpresivamente en una fábrica de electrodomésticos que es el símbolo más reciente de la pérdida de empleos franceses a plantas en ultramar.

Cuando Macron estaba reunido con dirigentes sindicales de la planta Whirlpool en el norte de Francia, Le Pen apareció en la propia fábrica, en medio de los trabajadores con chalecos protectores amarillos y se declaró la candidata de la clase trabajadora francesa.

La astuta maniobra, que el canal noticioso BFM transmitió en vivo, tuvo como consecuencia inmediata restarle atención a Macron. Mientras Le Pen se tomaba selfies con la gente frente a la planta, él apareció de traje y corbata en una reunión a puertas cerradas con dirigentes sindicales en Amiens.

El contraste de imágenes —la acción en la calle contra el formalismo de la reunión— es revelador de la astucia política de la dirigente nacionalista.

La candidata presidencial de ultraderecha Marine Le Pen, izquierda, es recibida por obreros de una fábrica de electrodomésticos en Amiens, Francia, miércoles 26 de abril de 2017. Cuando su rival centrista Emmanuel Macron estaba reunido con dirigentes sindicales en la planta Whirlpool, Le Pen se presentó en la puerta de la fábrica y se declaró candidata de los trabajadores para las elecciones del 7 de mayo. (AP Foto)

Le Pen, de 48 años, libra su segunda campaña presidencial después de quedar tercera en 2012, en tanto Macron, de 39, es un ex banquero de inversiones y ex ministro de Economía que nunca ha ejercido un cargo electivo.

Incluso antes de la aparición inesperada de Le Pen, la intervención de Macron en el futuro de la fábrica Whirlpool en una región donde Le Pen obtuvo la mayoría de los votos era una jugada de gran riesgo. El centrista proeuropeo debía buscar un difícil equilibrio entre la defensa de su programa para enfrentar el desempleo crónico del país sin caer en la trampa de hacer promesas que, en caso de ganar, difícilmente podría cumplir.

La fábrica en Amiens, que prevé cesar la producción de secarropas en los próximos meses para ceder esa división a Polonia, se suma a una lista de plantas amenazadas que se han convertido en símbolo de la pérdida de empleos franceses en las campañas presidenciales.

Le Pen ha prometido mantener abierta la planta de Amiens a toda costa si gana las elecciones.

Ante la necesidad de ganar millones de votos más para vencer a Macron el 7 de mayo, ha puesto todo el énfasis en sus denuncias de que el programa económico liberal de su oponente significaría la pérdida de más empleos.

Un hombre camina junto a carteles electorales de los candidatos a la presidencia de Francia: el centrista Emmanuel Macron, a la derecha, y la candidata de ultraderecha Marine Le Pen en San Juan de Luz, en el suroeste de Francia, el miércoles 26 de abril de 2017. (AP Foto/Bob Edme)

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