La violencia del poder

Por Fernando Balseca
Quito, Ecuador

No tiene absolutamente ningún sentido que, temprano por la mañana del jueves 22, varios funcionarios del Ejecutivo realicen llamados para que se desarrollen pacíficamente las movilizaciones callejeras si la Marcha por el Agua, la Vida y la Dignidad, desde que empezó el 8 de marzo, ha sido atacada por una escalada de violencia simbólica expresada en las palabras y en los gestos del presidente Rafael Correa y en la infame propaganda concebida por el régimen y pagada con dineros públicos. Esto es la doblez: hacernos creer que el gran poder propicia la neutralidad cuando, en realidad, ha preparado un terreno minado.

Escondida tras la amable imagen del anfitrión que “espera” con otra concentración popular a los marchantes indígenas y mestizos, se desnuda una concepción brutal del ejercicio del poder, que nos está corroyendo hasta por dentro de los hogares. La trampa, ¿o la mofa?, es que el hospedero afirma alistarse para recibir al visitante, pero, en verdad, está fabricando un ambiente de belicosidad que la marcha convocada por los indígenas no ha tenido desde que salió de Zamora. El presidente Correa no se comporta como un demócrata, aunque en la víspera de la llegada de la caminata a Quito haya insistido en que las contramarchas por él citadas pretenden defender la democracia.

Las actuaciones del gobernante, y las de sus acríticos allegados, no son una escuela de reconciliación. Por el contrario, son la fuente principal de generación de violencia simbólica en el Ecuador, pues han demostrado incapacidad para respetar a quienes portan una idea contraria, sea esta individual, como en el caso de los periodistas y columnistas de opinión, o social, como cuando determinados sectores de la sociedad deciden protestar amparados en la letra de la Constitución. La guerra no ha sido planteada como un desastre en el cual podríamos caer; para los administradores del poder, la clasificación tajante entre amigos y enemigos parecería ser el punto de partida.

La inteligencia de nuestros gobernantes está carcomida por una comprensión iracunda del poder que, con el justificativo de la legitimidad de las elecciones ganadas, erige como única validez una sola figura de cuyo ánimo depende el pulso de una ciudad, la suerte de un país, el destino de millones de ciudadanos. Esto es inaceptable. No puede ser que la vida cotidiana se someta a la voluntad, los gustos, las ideas, el humor y los sueños de un solo hombre o de un partido. Es vejatoria semejante falta de humildad. No es dable que, para afirmar una ideología, sea necesario destruir al otro, aunque esa sea la condición de la conflagración.

Un presidente que no se edifique como un genuino pacificador nos insulta y nos irrespeta a todos. Antes peleábamos contra las medidas económicas y las políticas antipopulares estatales; ahora batallamos a dentelladas entre nosotros. No estoy abogando por un manejo ingenuo. El mexicano Jesús Silva-Herzog Márquez, en La idiotez de lo perfecto: miradas a la política, escribe que “no hay política sin violencia. Pero tampoco hay política que sea pura violencia, puro conflicto, enemistad pura. Tan falsa es la política sin conflicto como la que es solo conflicto”. No sé hasta cuándo admitiremos una gobernanza cuyas acciones se regodean en la violencia.

* El texto de Fernando Balseca ha sido publicado originalmente en El Universo.

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15 Comments

  1. este es correa presidente de ecuador,que verguenza,que sea el que propisie la confrontacion entre hemanos ecuatorianos,con su unico afan el poder,que engano se acuerdan,decia que era pacificador que el pueblo seria el mandante,fuera mentiroso,tramollero,el pueblo te dice basta,y acuerdate que no son cuatro pelagatos,ya esta llegando tu fin malparido.

  2. Fernando, muy claro tu diagnóstico. La pista que nos da Jesús Silva-Herzog es invalorable: los idiotas se creen perfectos, y son funestos porque se entusiasman desde y para el poder. Mi pregunta es si se puede regresar al momento previo a una división amigos-enemigos, a un momento de racionalidad humilde y realista, o si ya pasamos la raya «irreversiblemente»(como le gusta recalcar al irresponsable de Carondelet ) y entonces sólo hay lugar para una racionalidad estratégica, pragmática y violenta. O más bien, haría falta entender el balance entre ambos componentes ?

  3. Los indígenas y sectores sociales de la marcha traen un pliego de propuestas y peticiones. Correa y sus socios no enfrentan eso, cambian de tema, empiezan con gritos histéricos a hablar de golpismo, de electorerismo, bla-bla ridículo y cobarde. O sea : qué pasa con la minería daña ambiente, con el problema de la tierra, los despidos, o lo que está pasando en las universidades, etc etc.

  4. Los indígenas y sectores sociales de la marcha traen un pliego de propuestas y peticiones. Correa y sus socios no enfrentan eso, cambian de tema, empiezan con gritos histéricos a hablar de golpismo, de electorerismo, bla-bla ridículo y cobarde. O sea : qué pasa con la minería daña ambiente, con el problema de la tierra, los despidos, o lo que está pasando en las universidades, etc etc.

  5. Todos los tiranos agrupan masas para confundir que tienen respaldo como el (mashi), esos respaldos custan mucho dinero miles de millones y es plata del pueblo. Tan solo es cuestión de tiempo igual será arrastrado él y todos sus adulones. El genuino pueblo Sirio sufre y el mundo mudo es el espectador.

  6. Todos los tiranos agrupan masas para confundir que tienen respaldo como el (mashi), esos respaldos custan mucho dinero miles de millones y es plata del pueblo. Tan solo es cuestión de tiempo igual será arrastrado él y todos sus adulones. El genuino pueblo Sirio sufre y el mundo mudo es el espectador.

  7. al mejor estilo populachero, la marcha del gobierno sociolisto financiada con dinero de todo el pueblo ecuatoriano, termina con un fiesta y circo. Claro los seguidores robolucionarios se tragan ese circo y siguen creyendo en la sonrisa cínica del payaso mayor…pero poco a poco el circo se les acaba y se van quedando sin fiesta ni sonrisitas…y entonces que van a hacer? qué van a decir? a quién van a culpar? en qué balcón van a vociferar? serán víctimas de su propia ley…seguro que si.

  8. … que les insulta y todo se supone en nombre de la democracia. El Presidente deberia haber extendido la alfombra a todos los que quieren participar en un mejor gobierno, dialogar, escuchar, y hacer las cosas bien, pero solo se le oyo hoy dia dando gritos e insultos, y mientrs tanto, como dicen algunos, en la costa la gente se inunda, en otras partes del pais no hay agua, en Quito, la gente cierra negocios por miedo a la policia y a las personas en las calles en esta divergencia de idea.

  9. He estado mirando CNN y le entrevistaron a la Ministra del Pueblo, y se miraban las imagenes de confrontacion cerca del Edificio de la Asamblea, y cuando le preguntaron de esto, ella respondio lo que siempre dice, que la gente esta manipulada por gente de afuera, que la gente del Ecuador esta feliz con Correa, etc. etc. etc. y mientras ella hablaba su verdad, la verdad se veia en la pantalla de TV. El mundo esta mirando esto y miran a un presidente que insulta a la gente, que los llama nombres…

  10. No se si oyeron con cuanta labia Rafael Correa elogio a la policia y al ejercito, como los alabo, y sin embargo, hace casi hace 18 meses, los insulto, llamo cada palabra que se le vino a la mente ( ninugna buena ni elegante, ni digna de que un presidente las pronuncie), como cambian los tiempos, bien dice el dicho: » Conveniencia, amiga mia eres y te uso a mi gusto».

  11. Me pregunto si los perros fieles DEL TIRANO  que vinieron pagados los $20, el sanduche y la cola que les ofrecieron, dejaron limpia la plaza de la independencia, sin basura, sin orines, sin gargajos y escupitajos en el piso y sin heces fecales en las jardineras?

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