Del tarimeo al tuiteo

Por Lula Garay de Gilbert
Guayaquil, Ecuador

Cuánta barbaridad, compañerito, hemos leído en tuiter estos últimos quince días. No solo uno tuiteó a otro pidiéndole “…. que inaugure su cerebro antes de hablar conmigo…”, sino que luego se armó un tuiteo del san flautas. “Tralalá” venía; “Blablablá” respondía. Y los 140 caracteres no abastecían para este “diálogo” tan profundo, que hasta los genes salieron a bailar de lado y lado.

Que si tu papá esto, que si tu hijo el otro, que si tu esposa, que si tu mujer; en fin, compañerito, era un toma y daca, un dedo a dedo, en el tuiteo y destuiteo; tanto tuit que me pones, tuit que te contesto; y mientras más grosero “más mejor”, y así… el tuteo del tuiteo era tal que hasta salió a la luz una palabra que en mi cabeza se ha quedando rebotando: “pacto”.

Entre el compañerito de los pelucones y el compañerito de la oligarquía, supuestamente ha existido un «pacto». Entiéndase como tal, según la wiki, “un convenio o tratado solemne, estricto y condicional entre dos o más partes, en que se establece una obediencia a cumplir uno o varios acápites establecidos en un contrato formal y en que ambas partes se comprometen a ejecutar ciertas acciones y a recibir retribuciones de la otra parte por su cumplimiento. Jurídicamente de este concepto se deriva el documento de carácter legal como un contrato o tratado internacional”.

¿Si leyeron la palabrita obediencia? ¿Qué habrán pactado a cambio? Esa es la parte que nos falta saber. Porque el “déjenlo volver” ya sabíamos; pero en qué consistían las retribuciones a cambio de ello, todavía no. El uno se comprometía da dejarlo volver, ¿Y los otros, qué debían hacer, dejar de hacer o, peor aún, dejar hacer?

Ahora se han montado en el show de las fotografías de los niños. Yo entiendo que solo los padres pueden autorizar la publicación de las fotografías de sus hijos. En todo caso, allá entre blancos con ese rollo fotográfico. Lo que no comprendo, compañerito, es cuantas imágenes hemos visto nosotros de políticos haciendo campaña con videos en los que aparecían sus propios hijos; o cuantos niños en pancartas o carteles en los que aparecen felices del futuro de la patria. ¿Se acuerdan?

Pero ahora a más de sabatinear, también lo vemos tuitear. A veces, hasta con guión prestablecido. ¿Se imaginan cuanto progresaríamos todos si en lugar de insultar por todos los medios posibles y con todos los recursos, los políticos gobernaran con la cabeza, estrenaran su cerebro y dejaran de ser locos que aman, o locos que odian?

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4 Comments

  1. JJAJAJA…EXELENTE EL RETUTEO….SOLO LES FALTO DECIR ..LA RETUTA QUE LO PARIO…
    PERO BUENO LO IMPORTANTE DE TODO ESTO ES, QUE EL PUEBLO CONOCE QUE LAS VIEJAS PRACTICAS DE LA PARTIDOCRACIA SIGUEN TAN VIGENTES COMO ANTAÑO, ADEREZADO CON UN TOQUE…QUE DIGO UN TOQUE…BASTANTE DE PREPOTENCIA, AUTORITARISMO, CORRUPCION, SIN OLVIDAR EL CRECIMIENTO DE LA DELINCUENCIA, NARCOTRAFICO  Y OTROS MALES QUE CON LA PARTIDOCRACIA NO ERAN TAN TOLERADOS Y SOCAPADOS COMO SUCEDE EN ESTA REVOLUCION.

  2. Lula… A mi me ha dado asco ver y leer el espectáculo brindado por ese par de actores políticos. Han utilizado a inocentes criaturas en lugar de dejarlos tener una niñez tranquila. Las expresiones de la asambleista Rosana Alvarado han sido despectivas y groseras para con los niños. La madre de los chicos bien que trabaja en TC televisión y también es asambleista. ¿Dos suelditos??… Y dicen que no hay pacto. TODO es un SHOW, solo buscan réditos electorales. Qué REPUGNANCIA.   

    Estas son las palabras de la asambleista para aquellos que quizás no leyeron:Rosana Alvarado, afirmó ayer que “nadie le va a quitar al PRE a sus niños ni a sus niñas. Además, no sabríamos qué hacer con hijos del PRE…“ (sic)

    Fallamos todos aquellos que les prestamos atención con nuestros comentarios y los diarios con sus «noticias», deberíamos tratarlos con indiferencia a ver si entienden. Me abstendré de comentar en ESTE tipo de noticias como rechazo por el lenguaje y las actitudes de esos tipos. Los dos son CULPABLES… Pésimo ejemplo que dan a la ciudadanía…Cierro este capítulo porque no voy a caer en juegos denigrantes. Hasta otro día Lula.

    Mauricio Alejandro… cuánta verdad encierran tus palabras…las viejas prácticas no han desaparecido aunque nos prometieron que lo harían. ASCO.

    • Algo que recuerdo me enseñaron en mis clases de publicidad en la U, fue
      «Cualquier publicidad es buena».

      Mientras se hable de ellos ya sea bien o mal, todo aquel con complejo de Adonis
      infla su ego.

  3. Lo que hubo entre los locos no fue tuiteo, fue «tuteada» y «retuteada», con uso y abuso de las gentiles y donosas maneras que los caracterizan, si, pues han hecho gala no sólo de la cuna en que nacieron sino, sino adicionalmente de una educación forjada a golpe de insulto y agresión.

    Solamente así se explica, señora, el penoso, bochornoso y obsceno espectáculo virtual (¿o será tuiteal?) que nos proporcionaron tanto quien está investido de la alta magistratura de presidente de la república, como un acomodado, en lo económico, candidato a dicha magistratura y un ex-presidente que por avatares de la vida (léase juicios que no enfrenta) reside en Panamá, a mas de sus colaboradores, esbirros y seguidores, quienes pusieron también su grano de arena de vulgaridad.

    Estos ilustres personajes se enzarzaron en un pico a píco, haciendo honor al pico del ave que es logo de Twitter creo yo, digno de mejores causas, que yo tenía, que tú me quitaste, que me ofreciste y no cumpliste, no me quieres pagar, yo te voy a cobrar, estrénate este(el cerebro no sea mal pensada) y un largo etcétera que no vale la pena reproducir.

    Al leer el título de su artículo supuse que usted había trasladado la tarima del mundo real al mundo virtual, ya no es de madera sino de cibernéticos tuits que se distribuyen a lo largo y ancho de la red, ya no cuentan los discursos, las bailarinas, Los Iracundos, Pueblo Nuevo y otros, sino cuanto puede decirte, y maldecirte, en 140 caracteres.

    Respecto a pactos, en este país los han habido de todos los sabores y todos los colores, así que uno mas, no le hace.  Y respecto al show, señora este país es un circo desde que iniciamos nuestra vida republicana, el aparecimiento de los medios masivos de información y de las redes virtuales lo que han hecho es hacerlas del conocimiento, y disfrute claro, de las mayorías, nada mas, como dijo Discépolo en su Cambalache «vivimos enterra’os en un merengue y en el mismo lodo todos manosea’os», así que usted tranquila, como en todo circo que se precie de tal, «el show debe continuar» y continuará mientras con nuestra pasividad y obsecuencia lo sigamos soportando.

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