La Feria del Libro de Quito, fiesta de la cultura y homenaje a Fidel Castro

El pasado miércoles 23 de noviembre de 2016, en su columna de Opinión, el Diario La República, publicó un desacertado y grotesco texto de Miguel Molina Díaz, bajo el título “La Feria del Libro de Quito, o una masturbación a Fidel Castro”.

Basta con leer el título de su artículo, para conocer la catadura moral y sobre todo las perversas intenciones de esta persona.

El mencionado escrito pretende evaluar, desde la ofensa y el descrédito más insensato, a la recién finalizada Feria del Libro de Quito y, particularmente, a la muestra artística y la participación de una numerosa delegación de prestigiosos autores e intelectuales cubanos que viajaron a Ecuador trayendo una representación de la cultura cubana e interesados en intercambiar con el público quiteño que colmó el stand y las presentaciones que se hicieron durante toda la Feria, en un clima de amistad y entendimiento.

Cuba tiene la fortuna, como pocas naciones en América Latina, de contar con una pléyade de escritores surgidos como resultado de las políticas que se implementaron desde los albores de la Revolución Cubana, cuando se identificó el impulso a la cultura como pilar invaluable para construir una nueva sociedad, un nuevo sujeto social. Una representación de ese universo de consagrados y noveles autores de las letras cubanas, participaron en FIL Quito 2016, como reflejo de la diversa y autóctona creación de la isla caribeña.

Por solo citar a algunos de los importantes autores presentes bastaría mencionar a: Senel Paz, destacado escritor y guionista; Leydi González, poetisa y ganadora del premio Loynaz; Jorge Fornet, Director del Centro de Investigaciones de la Casa de las Américas; Marilyn Bobes, periodista, poetiza y narradora, dos veces ganadora del Premio Casa de las Américas; Víctor Rodríguez, poeta, periodista y crítico, quien obtuvo el premio Loewe en el año 2016 y otros que prestigiaron la condición de Cuba como país invitado de honor a la Feria. Para el Sr. Molina ninguno de estos autores tiene alguna relevancia.

Sin embargo, el autor de la mencionada “opinión” reservaba su mayor cuota de veneno, insultos y groserías, a la presentación de la exposición fotográfica “Fidel es Fidel” y a la propia figura del Comandante en Jefe Fidel Castro. Habría que decirle al señor Molina que sus diatribas contra una personalidad histórica como Fidel Castro, no solo se estrellan contra su estatura de gigante político, sin hacer la más mínima mella, sino que también constituyen una ofensa al intelecto y un agravio a la seriedad y a la ética periodística.

Fidel ha trascendido a la historia por méritos propios, muy bien ganados en su enfrentamiento al imperialismo norteamericano y en sus luchas a favor de los desposeídos y por un mundo mejor. El señor Molina intenta desconocer esta realidad histórica. Hacerlo es un ejemplo más de la evidente orfandad de ideas que lo caracteriza. Esto explica también por qué tiene que acudir, recurrentemente, a la falta de respeto burda y grosera para exponer sus “argumentos”, y a lo que es peor, a la defensa de figuras hechas por encargo y con un desprestigio absoluto, como es el caso de Yoani Sánchez.

Es lamentable la reducida mirada y el desconocimiento del Sr. Molina a la amplia producción de conocimientos culturales, científicos, políticos y de todo tipo, que desde Cuba impactan en todas partes del mundo. Su interés de agredir, malintencionadamente, la indiscutible obra de la Revolución Cubana en el campo de la cultura, se estrellará siempre contra el imbatible muro de más de 50 años de resistencia heroica y viril. Como dijera el héroe nacional de Cuba, José Martí: “El que no tenga el valor de sacrificarse, por lo menos debe tener el pudor de callarse ante los que se sacrifican.”

Nota: En los momentos en que se redactaban estas ideas, nos sorprendió la terrible noticia del fallecimiento del Comandante en Jefe Fidel Castro o simplemente de “Fidel” como el pueblo le decía. En estas pocas horas, hemos recibido cientos de llamadas telefónicas y mensajes de condolencia de compañeros del pueblo y del gobierno ecuatorianos. A todos ellos vaya nuestro agradecimiento eterno por sus muestras de cariño, respeto y admiración hacia la figura del líder de la Revolución Cubana.

A nuestro Fidel le decimos, que seguiremos su lucha, que seguiremos sus ideas, que seguiremos su ejemplo, que la Revolución no será vencida jamás y que su ejemplo guiará por siempre a las generaciones de revolucionarios cubanos.

Más relacionadas