¿Qué está pasando?

;aríasol Pons

Esta pregunta brinca cuando algo nos sorprende de sobremanera o cuando es tan complejo el tema que debemos alejarnos para comprenderlo.

Ahora la siguiente pregunta es si lo que está pasando sorprende a alguien en nuestro país. ¿Pensamos acaso que Alianza País sería la misma una vez Rafael Correa no estuviera en el país? ¿Pensamos ahora que hay un cambio en la ideología del par que gobierna? ¿Sorprende a alguien las denuncias de sobreprecios, deuda monstruosa, contratos no revelados, informes manipulados, irrespeto a la ley, abusos de poder, amedrantamiento a la prensa? Mi respuesta es no.

Lo que sucede es que el poder de Alianza País bajo el régimen de Rafael Correa mutó, como era natural que suceda. En el tablero del poder se mueven fichas muy pesadas y los hechos de la pasada década no son la excepción. Un expresidente vanidoso que no tolera no llevar la batuta del poder presiona para que los hechos se den a la fuerza. La filtración de la prensa sobre los audios que forman parte de varias investigaciones penales, sin entrar en fases ni tecnicismos, solo comprueban que todavía vivimos la estela de la censura. Si bien el actual fiscal no puede procastinar ni posponer una investigación como lo hizo el fiscal anterior debido a la gran presión mediática y a la contundencia de la evidencia, pareciera que se deja llevar por elementos externos que justifican su accionar. Es lo mismo que hace el presidente Moreno, deja que el río corra y que los actores desvelen sus intenciones. Quizás como un observador frío esperó a que Jorge Glas se manifieste pública y formalmente en contra suyo para poder justificar un proceder. El tuitea diciendo que utilicemos las redes para crear valor y es un discurso bueno, siempre y cuando en lo concreto el país avance creando valor y no escondiendo evidencias.

Es tanto lo que hay en juego que las cosas cambian mientras se escriben muchos artículos acerca de los sucedido; que el presidente Moreno le haya quitado las funciones de vicepresidente a Jorge Glas y que este se rehuse a renunciar. Moreno no puede forzar a Glas a dejar su cargo pues fue elegido por votación popular. Debe sentirse como en la película “Durmiendo con el enemigo”. Mientras tanto, los tuits del rebaño van tomando partidas y colores, es interesante ver el desmembramiento, quizá cosmético en algunas partes, de un grupo que frecuentemente hablaba de ideología y matriz productiva. Hoy todo cae por su propio peso y la revolución ciudadana queda con sabor amargo a poquísimos meses de haber cambiado de gobierno.

Aún así, vuelvo a la pregunta ¿Qué está pasando? Ricardo Patiño, hasta este momento, sigue como asesor de Presidencia, el equipo económico correista sigue al mando de las decisiones que afectan nuestro bolsillo. Las cifras de crecimiento económico para 2017 no cuadran con la de los organismos internacionales, sin embargo, parece que hay esperanza en el imaginario colectivo de que el pragmatismo ha tocado la puerta de Carondelet.

Está claro que lo que está pasando es que ahora se juega distinto, los ambiguos irán por la supervivencia y probablemente los envalentonados irán con el río. Hay mucho por ver, pero mucho más por hacer.

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