Guayaquil, Ecuador
El 2018 cerró con un incremento de los precios de los combustibles extra, eco país y súper derivado de la eliminación parcial de los subsidios de los mismos; medida que busca reducir el peso en el presupuesto del estado al gasto asignado al subsidio de los combustible. Las gasolinas extra y ecopais pasaron de USD 1,48 a 1,85 dólares por galón, mientras que la súper (previamente ya tuvo una eliminación parcial del subsidio) paso de USD 2,98 a 3,10 por galon; lo que significaría un ahorro de entre 600 a 800 millones dólares en el presente año.
El gobierno, para evitar protestas, esta negociando con diversos sectores transportistas planteando medidas compensatorias a los mismos, tales como entrega de cupos para el despacho de combustible subsidiado de tal manera que se evite el incremento de precios en los servicios que ofrecieron la transportación. Ahora bien, ¿es dable que un servicio de transportación privada como los taxis reciban subsidios? Ante esa situación se alzan reclamos en diferentes sectores de la sociedad que no consideran adecuado que este gremio (o mejor dicho un servicio privado) reciba una compensación por lo que resulta evidente que hay una motivación política por parte del gobierno para plantear esta medida, lo que podría llevar a que otros grupos (transportistas urbanos, por ejemplo) soliciten compensaciones frente a presente y futuras medidas económicas que se tomen.
La entrega de estas compensaciones reducirían el efecto neto de la eliminación de los subsidios en el orden del 25% al 30% aproximadamente, lo que conllevaría a que en el futuro tome otras medidas dado que no conseguirá reducir completamente el problema fiscal del gobierno. También, se discute al interior del gobierno el alza del precio del diésel, dado que la eliminación del subsidio en este tipo de combustible genere un impacto mayor en diversos rubros de la canasta básica familiar, especialmente en transporte y alimentos, que directa o indirectamente estén relacionados. En una situación “extrema” en que se libere el precio de diésel (en Ecuador se expende a 1.037 dólares el galón), y llegue a niveles internacionales tomando como referencia el precio en Estados Unidos donde se vende a 3.16 dólares el galón, es decir 3.04 veces que en nuestro país, podría generar un incremento de hasta el 93% aproximadamente en la cadena de transporte y comercialización de los productos agrícolas, tomando como supuesto que el resto de rubros que afectan a quienes transportan este tipo de carga solo suba en 1.03% su precio acorde a la inflación que proyecta el gobierno para el 2019, cabe señalar otros rubros que componen los gastos de este gremio (aparte de combustibles) son: lubricantes, neumáticos, reparaciones y mantenimientos, personal, gastos operativos y peaje. El gobierno no ha presentado (aún) otras alternativas de compensación como liberación de aranceles para partes y lubricantes que usen los transportistas.
En los mercados el impacto estaría entre el 5% al 15% al alza en los precios de los productos agrícolas, dependiendo de su origen, los intermediaros que estén presentes en la cadena de comercialización, el margen de ganancia , etc.
De igual manera, hay otros sectores de transportes que usan diésel que podrían verse afectados por una revisión del subsidio del diésel, como son los expresos escolares. Por lo anterior, será necesario que el gobierno central coordine acciones con Municipios e Intendencias para evitar una “ola especulativa” que lleva a un aumento de precios mayor, y por ende a un aumento de la inflación. Este proceso de transición se irá asentando dentro de los siguientes 6 meses de que se tome medidas como las señaladas, en todo caso se irán asimilando por los hogares, cabe señalar que los ingresos familiares deberán administrase mejor para cubrir las necesidades principales. (O)