Vecindario (España), 4 jun (EFE).- La expresidenta de Ecuador y actual directora de la Fundación Natura Regional, Rosalía Arteaga, afirmó hoy que su país atraviesa un periodo de estabilidad política, aunque se confesó preocupada por un «excesivo autoritarismo» y la falta de libertades, como la de expresión.
Vicepresidenta de Ecuador en 1996 y jefa del Estado durante unos días en febrero de 1997 Arteaga participó hoy en Gran Canaria (Islas Canarias, Atlántico) en el octavo Seminario Internacional de Comarcas Sostenibles,.
En cuánto a la economía, la ex presidenta dijo a Efe que su país está en un periodo de bonanza gracias al petróleo, pero, en su opinión, esta fase «es temporal», por lo que recomendó una apuesta por otras soluciones.
Señaló que «no sólo desde la política se pueden hacer cosas positivas», sino también desde el ámbito del medio ambiente y de la educación, sectores en los que desarrolla actualmente su actividad profesional.
Por ello, fue invitada por la Mancomunidad del Sureste de Gran Canaria a participar en el seminario internacional de comarcas sostenibles, en el que Arteaga ofreció una ponencia titulada «Experiencia andino-amazónica».
En ella, habló de los recursos naturales que llegan a la Amazonía desde Los Andes, en especial el agua y la biodiversidad.
Al respecto, explicó que la región amazónica tiene 7,5 millones de kilómetros cuadrados y más de treinta millones de habitantes, de los cuales veintitrés millones son brasileños.
«Esto demuestra que no es un territorio vacío», apuntó Arteaga, antes de denunciar la «falta información» sobre el mayor bosque del planeta.
La expresidenta recordó que son copropietarios de la zona amazónica ocho países -Bolivia, Brasil, Ecuador, Colombia, Guayana, Surinam, Perú y Venezuela-, en los que se han ejecutado políticas «buena y malas» en relación con esa extensa región.
A su juicio, la zona se ha visto afectada por factores internos y externos, como el cambio climático, que ha generado mayores incendios, a lo que hay que sumar la explotación minera o agraria de sus habitantes, entre otras causas.
Arteaga destacó que los principales retos son la sostenibilidad, la calidad de vida para la gente que vive en la zona amazónica y la conservación de un lugar calificado como «el pulmón del planeta».
«En realidad no es el pulmón sino el aire acondicionado del planeta», porque, si no existiera la región amazónica, aumentaría varios grados la temperatura de la Tierra», indicó. EFE