Caracas, 23 jul (EFE).- El líder opositor venezolano, Henrique Capriles, alabó hoy «el modelo del desarrollo» de Chile y Perú, países que visitó la semana pasada, y comparó al presidente de su país, Nicolás Maduro, con el exgobernante peruano Alberto Fujimori.
«Uno va a esos países y ve sus carreteras (…) y cómo se han industrializado y se pregunta: ¿si ellos pudieron, cómo nosotros no vamos a poder? ¡Claro que podemos, lo que debemos es lograr el cambio!», subrayó Capriles en su programa semanal de televisión.
Destacó que los dos expresidentes chilenos con los que se reunió, los democristianos Eduardo Frei y Patricio Aylwin, ya que no fue recibido por los exgobernantes socialistas Ricardo Lagos y Michelle Bachelet, le recomendaron mantener informada de su causa a la comunidad internacional y a la prensa extranjera.
Ello, añadió, porque el Gobierno de Maduro «pretende aislarnos, haciéndole ver al mundo que quienes estamos aquí construyendo una alternativa somos golpistas» y en ese empeño le achaca supuestas afinidades con el exdictador chileno Augusto Pinochet (1973-1990).
Capriles insistió en que el Gobierno de Maduro también «pretende repetir afuera la mentira de que quienes ganamos» las elecciones presidenciales del pasado 14 de abril, en las que oficialmente triunfó Maduro, «somos responsables» de la decena de muertes que dejaron diversos hechos de violencia postelectoral.
«Nosotros lo que hicimos fue evitar los casos de violencia» y así «me lo reconocieron todos los expresidentes (chilenos) y el mismo presidente (Sebastián) Piñera», añadió Capriles al recordar que el actual gobernante de Chile también lo recibió el pasado viernes.
Maduro destacó que Piñera recibió a Capriles en la residencia del senador Jovino Novoa, «subsecretario privado de Pinochet, el dictador fascista, el que desapareció a 10.000 jóvenes chilenos, el que privatizó la educación, la salud y todos los servicios públicos, y ahí estaba la derecha venezolana», según dijo.
«¿Hablando de qué? ¡Pidiendo apoyo para una aventura golpista contra el pueblo venezolano!», exclamó Maduro y subrayó que sus opositores «no han encontrado ni encontrarán un Pinochet en Venezuela».
Capriles se limitó a responder hoy que «Chile derrotó, tumbó la dictadura» de Pinochet y suma ya 23 años consecutivos en democracia, aunque aclaró que no comparte el modelo educativo chileno, porque él propone «educación pública, gratuita y de calidad para todos».
Entre Maduro y Fujimori «sí que hay similitudes, por ejemplo, en cómo trataba Fujimori de montar situaciones conflictivas para echarle la culpa a la oposición», dijo Capriles.
«Igualito, el mismo libreto, idéntico» a lo que hace Maduro en su contra, insistió y mostró unos panfletos donde aparece una foto suya junto a la estrella judía y la esvástica nazi, que dijo fueron distribuidos en Caracas mientras él visitaba Chile y Perú.
«Eso es lo que hace un Gobierno que, por su mala política económica, por su modelo fracasado que pretende imponerse por medio de la fuerza y el secuestro institucional, el peor Gobierno de todo el continente, ilegítimo, además, tiene una inflación mensual que en Perú es la de un año», remarcó.
Capriles también agradeció al expresidente peruano Alan García «la gentileza de atendernos» y lamentó que no lo hiciera el actual gobernante de ese país, Ollanta Humala, quien también ostenta la presidencia de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
«Insistimos mucho y lamentamos» la falta de un encuentro, ya que Humala «no solo es presidente de Perú sino de Unasur hasta septiembre y Unasur y otros organismos internacionales no pueden ser instancias para defender intereses de los presidentes de turno», remarcó.
«No fuimos a plantear el desconocimiento» del Gobierno de Maduro, sino «el caso venezolano y cómo la legalidad y la legitimidad son dos cosas distintas», sostuvo el líder opositor venezolano. EFE