Un helicóptero de Aeropolicial ha sido atacado con disparos por desconocidos, efectuados desde la ribera colombiana del río Mataje, por lo que ha tenido que hacer un aterrizaje de emergencia en el norte de la provincia de Esmeraldas, en la zona fronteriza con Colombia, según ha informado el Ministerio del Interior. En la zona opera la columna móvil Daniel Aldana, de las FARC.
El hecho sucedió cuando la aeronave sobrevolaba el cantón San Lorenzo, a las 10:00, mientras participaba del operativo binacinal Sin Fronteras II, que se desplegó en localidad fronteriza de Casa Rosada, en Esmeraldas. El helicóptero de siglas PN 126 Guayas ha sufrido el impacto, aparentemente, de un proyectil de arma de fuego en la parte delantera derecha de la cabina y por esa razón realizaron el descenso.
Al momento del incidente, en el helicóptero de la unidad Aeropolicial se movilizaban siete miembros del Grupo de Intervención y Rescate (GIR, fuerza especial de la Policía) y un agente de la Dirección Nacional Antinarcóticos. La nave era parte de un operativo conjunto entre la Policía Antinarcóticos, el Grupo de Intervención y Rescate (GIR), la Unidad Canina de Antinarcóticos y la Fiscalía de Pichincha, que haría un allanamiento por orden judicial en varias casas de las parroquias Changuaral y Mataje, donde se sospechaba existen centros de acopio de drogas.
Uno de los proyectiles impactó en el fuselaje y dañó un panel de fusibles y otro de circuitos, lo que provocó un brusco movimiento del helicóptero y anuló el indicador de combustible. “Entramos en un descenso muy rápido, empezamos a desesperarnos en la cabina, sentí que me habían impactado, sentí un calor en el cuello y le decía al pasajero que me toque el cuerpo”, relató César Avilés, piloto del helicóptero.
El oficial indicó que pudo controlar el aparato pero que se rehusó a efectuar un aterrizaje de emergencia en la misma zona, ya que esta es considerada “un área hostil”, por lo que se dirigió hasta llegar a un cuartel en la zona de San Lorenzo, a unos cuatro o cinco minutos de vuelo del lugar del incidente.
Ya en tierra, el personal de la aeronave verificó que uno de los disparos había impactado en el pedal izquierdo del piloto, lo que impidió que la bala alcanzara al piloto.
“Para mí fue un milagro que me haya dado en el pedal. Si íbamos un poco más rápido, esa bala me hubiera destrozado todo el organismo. No sé qué hubiera pasado, tuvimos mucha suerte”, añadió Avilés.
Por otra parte, el Ministerio de Interior indicó que tras el incidente se realizaron coordinaciones con la Policía de Colombia y dos helicópteros colombianos tipo Blackhaw brindaron apoyo a la operación de salida de los primeros agentes del GIR que habían sido trasladados a la zona.
El informe también refiere de un intercambio de disparos entre los desconocidos y helicópteros colombianos.
El pasado 8 de agosto, un militar ecuatoriano y cinco miembros de un grupo ilegal, presumiblemente de las FARC, murieron en un enfrentamiento ocurrido en la provincia de Sucumbíos, en la frontera bilateral amazónica.
* Monoturbina Ecureuil AS 350 B2, de similares caracteísticas del helicóptero de la policía atacado el viernes 23 de agosto de 2013 en Esmeraldas.
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