Correa pide salida de militares de la Embajada de Estados Unidos

Ecuador (AP) — El presidente ecuatoriano Rafael Correa aseguró el miércoles que la relación con Estados Unidos pasa por ciertas tensiones y desconfianza mutua, y dijo que pedirá la salida de militares adscritos a la embajada estadounidense porque su número era excesivo.

También criticó la política externa estadounidense hacia América Latina a la que llamó «torpe», el espionaje de la Agencia Nacional de Seguridad y destacó que la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) es una alternativa de cooperación y mecanismo para resolver diferencias regionales sin la presencia de países hegemónicos.

En una reunión con corresponsales extranjeros el mandatario aseveró: «no nos vamos a engañar, hay ciertas tensiones, hay desconfianza mutua (en la relación con Estados Unidos), también hay grupos de derecha que si por ellos fuera nos mandarían a bombardear».

«Hay una política torpe de Estados Unidos con respecto a América Latina y lo que ellos consideran gobiernos hostiles, pero yo no soy hostil a Estados Unidos, no soy antiestadounidense… soy de una izquierda moderna y en lo personal quiero mucho a los Estados Unidos», dijo, al tiempo de recordar que en ese país obtuvo dos de sus títulos universitarios, uno de ellos de doctor en economía.

Correa, quien llegó el poder en enero de 2007 y tras ganar la reelección debe gobernar hasta 2017, aclaró que en Estados Unidos «tienen que aprender que aquí hay un país soberano que no va a aguantar humillaciones, chantajes».

Correa expresó que su gobierno está adoptando las acciones pertinentes para pedir la salida del excesivo grupo de militares de la embajada estadounidense en esta capital. No dio más explicaciones ni probables fechas para ello.

«Son alrededor de cincuenta ¿quién puede justificar algo así?», aseveró.

Añadió que «lamentablemente esta gente ha estado infiltrada en todos los sectores que lo más escandaloso parecía normal. Y volaban en helicópteros de las Fuerzas Aérea, de la Fuerza Terrestre, y era normal que soldados extranjeros estén volando con nuestros soldados en zona de frontera».

El agregado de prensa, de esa misión, Jeffrey Weinshenker, dijo a la AP, que «no hemos recibido ninguna notificación» al respecto.

«Hay aproximadamente 20 empleados militares y civiles plenamente acreditados ante el gobierno ecuatoriano para participar en una gama de actividades … todas nuestras actividades se realizan con la aprobación explícita de las autoridades ecuatorianas», añadió

Las relaciones entre ambas naciones han estado marcadas en los últimos meses por la salida de la Agencia Internacional para el Desarrollo de Estados Unidos (USAID), acusada de apoyar a la oposición y la renuncia de Ecuador a las preferencias arancelarias cuando Estados Unidos presionó para que Ecuador no le conceda el asilo a Edward Snowden, quien reveló el espionaje masivo del gobierno estadounidense.

Sobre la cumbre de la CELAC, prevista para la próxima semana en La Habana, el presidente ecuatoriano dijo que «queremos seguir profundizando y fortaleciendo ese espacio de procesamiento de diferencias a nivel latinoamericano y del Caribe, sin la presencia de países hegemónicos y en lo posible desarrollar instancias nuestras para diferentes temas, entre ellos derechos humanos».

Al abordar la situación de Julian Assange, el fundador de WikiLeaks refugiado en la embajada de Ecuador en Londres desde mediados de 2012, Correa señaló que «toda la solución en el caso de Assange está en manos de Gran Bretaña». Sobre Assange pesa una orden de prisión y un pedido de extradición de Suecia por supuestos delitos sexuales.

El presidente ecuatoriano también destacó la cooperación con Cuba en el área de salud y medicamentos. «Hay la decisión política de instalar… una industria farmacéutica pública y ahí está ayudándonos Cuba, que tiene una importante industria farmacéutica ya desarrollada», dijo.

* Foto de Portada: El presidente de Ecuador Rafael Correa gesticula al fin de un encuentro con la prensa extranjera en el palacio de gobierno en Quito, Ecuador, el miércoles 22 de enero de 2014. Correa aseguró el miércoles que la relación con Estados Unidos pasa por ciertas tensiones y desconfianza mutua, pero aclaró que no es antiestadounidense ni su gobierno es hostil a ese país. (AP foto/Dolores Ochoa)

El presidente de Ecuador Rafael Correa habla durante un encuentro con la prensa extranjera en el palacio de gobierno en Quito, Ecuador, el miércoles 22 de enero de 2014. Correa aseguró el miércoles que la relación con Estados Unidos pasa por ciertas tensiones y desconfianza mutua, pero aclaró que no es antiestadounidense ni su gobierno es hostil a ese país. (AP foto/Dolores Ochoa)
El presidente de Ecuador Rafael Correa habla durante un encuentro con la prensa extranjera en el palacio de gobierno en Quito, Ecuador, el miércoles 22 de enero de 2014. Correa aseguró el miércoles que la relación con Estados Unidos pasa por ciertas tensiones y desconfianza mutua, pero aclaró que no es antiestadounidense ni su gobierno es hostil a ese país. (AP foto/Dolores Ochoa)

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