La sede en Caracas del partido Voluntad Popular, que lidera el opositor Leopoldo López, ha sido allanada esta tarde por agentes de seguridad del gobierno venezolano. López, quien tiene una orden de prisión en su contra, no ha sido encontrado. Los últimos reportes en twitter, de los militantes del partido que se encuentran en la sede, decían que el edificio estaba rodeado por la fuerza pública y que estaban siendo atacados.
Horas antes, voceros del partido habían confirmado que mañana se realizará una marcha hacia el Ministerio del Interior para acompañar al líder político en la entrega de un pliego de peticiones.
«Nosotros estamos convocando a la marcha mañana con Leopoldo y no tengo ninguna duda que Leopoldo va estar allí», señaló el coordinador del partido, Carlos Vecchio, en una rueda de prensa.
Un tribunal de Caracas cursó orden de aprehensión contra López acusándole, entre otras cargos, de homicidio y terrorismo, tras los enfrentamientos que se produjeron al término de una manifestación en Caracas el pasado miércoles en incidentes que dejaron tres muertos y decenas de heridos.
López convocó ayer a la marcha afirmando que estará allí «para dar la cara» y pidiendo a sus seguidores que le acompañen vestidos de blanco hasta un punto desde el que caminará solo hasta llegar al Ministerio del Interior para entregar un documento con varias reivindicaciones.
«Hay testigos, fotos y vídeos de quienes dispararon (…) no existe ninguna responsabilidad de Leopoldo», aseguró Vecchio.
El coordinador político subrayó que marcharán vestidos de blanco «por la paz» del país, de manera «disciplinada», para evitar violencia y confrontación.
Vecchio comentó a Efe que en el caso de que López sea aprehendido por la justicia venezolana, la postura de VP sería la de rechazar la detención y exigir su inmediata liberación.
«Lo veríamos como una persecución, como un preso político más del Gobierno», apuntó.
Aseguró que el líder de la oposición venezolana, Henrique Capriles, acompañará a López hasta la sede la Ministerio del Interior junto a otros dirigentes opositores como la diputada María Corina Machado, que rechazan la represión en Caracas.
«Nosotros tenemos claro que en esta lucha hace falta todo el mundo, toda la unidad, el problema no está a los lados sino al frente y que aquí hacen falta todos los liderazgos», sostuvo.
El presidente, Nicolás Maduro, pidió anoche al dirigente opositor Leopoldo López que acepte la mediación de la Fiscalía y se entregue «sin shows», asegurando que hay planes de ultraderecha de matarlo para generar una crisis política.