El titular de la Senescyt René Ramírez dijo ayer, en el canal EcuadorTV, que organismos estadounidenses realizaron alrededor de 3500 extracciones de sangre a indígenas huaoranis para estudios científicos. Estas extracciones se realizaron sin su consentimiento.
El presidente Rafael Correa también se refirió en su última sabatina a este tema y añadió que el hecho se habría dado desde la década de los 70 y en complicidad con una petrolera que operaba en la Amazonia, la Maxus. En este caso habría participado la escuela de medicina de la Universidad de Harvard, en conjunto con el instituto Coriell.
Según Correa, con este plasma se hicieron varios experimentos, ya que estos aborígenes, quienes viven alejados de la civilización, «son inmunes a ciertas enfermedades».