El Gobierno de Chile desea reforzar su relación con Ecuador en materia de cooperación al desarrollo a partir de un esquema «que tiene domicilio en América Latina» y que otorga gran peso a la transferencia de capacidades, dijo el director de la Agencia Chilena de Cooperación al Desarrollo, Ricardo Herrera.
Con motivo de la visita que hoy efectúa a Quito la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, Herrera destacó el gran momento de las relaciones con Ecuador en ese ámbito, en el que el país andino prioriza también la cooperación orientada al desarrollo de talento humano, como parte de su estrategia política de cambio de matriz productiva.
El responsable de la Agencia Chilena de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Agcid) dijo a Efe que Ecuador es uno de los «socios privilegiados» de su país en materia de cooperación, una parte de su política exterior que Chile enfoca sobre todo en América Latina y, en particular, en Centroamérica y El Caribe.
La cooperación chilena «es ambiciosa, pero con personalidad, y su personalidad está en América Latina», insistió Herrera al exponer que «no se caracteriza por el volumen financiero, sino por la asistencia técnica» proporcionada, no por medio de consultores externos, sino de funcionarios públicos que transfieren sus capacidades al país receptor.
Ámbitos como el de la formación de recursos humanos, la agricultura y la seguridad alimentaria, la modernización del Estado y el apoyo institucional, la justicia y la seguridad y el medioambiente son algunas de las especialidades que «exporta» Chile a la región.
Herrera mencionó también la cooperación económica para el desarrollo, es decir, el traslado de capacidades para la buena utilización de los acuerdos comerciales, como otro de los segmentos destacados de la agencia que dirige.
«A veces logramos grandes ventajas arancelarias con un país en una negociación, pero a la hora de poner en marcha esas ventajas nos encontramos con barreras técnicas», explicó.
Por ejemplo, «no tenemos la trazabilidad para poder exportar un alimento, no tenemos una ficha única en la aduana… Todas esas capacidades, que Chile, porque tempranamente empezó a negociar, las tiene, las traslada también a otros países», comentó Herrera.
En la actualidad, entre los grandes proyectos de cooperación que impulsa Chile figuran una plataforma de formación de recursos humanos para América Latina y El Caribe, para formar a 2.000 funcionarios en temas de desastres naturales en cinco años y otra para formar empleados públicos en Centroamérica.
En el caso de Ecuador, país con el que existe un programa vigente para el periodo 2014-2017, en cifras, la cooperación podría alcanzar un valor estimado de entre 300.000 y 500.000 dólares anuales, según Herrera, y se articula con base en cuatro ejes, uno de ellos sobre eco-eficiencia de empresas.
En esta área, el proyecto en marcha supone la capacitación de quince empresas y se orienta a favorecer el ahorro energético y de materias primas, así como la disminución de residuos tóxicos.
Otro eje es el de la justicia, con la capacitación de cuarenta agentes penitenciarios, el adiestramiento canino para las aduanas y la donación de diez perros entrenados que formarán la Brigada Canina Ecuatoriana, señaló la Agcid en un comunicado enviado a Efe.
En cuanto al talento humano, Chile ha lanzado este año la convocatoria de becas «Manuela Sáenz» para alumnos de posgrado que podrán formarse en universidades chilenas, mientras que en lo que se refiere al eje social se pondrán en marcha programas de prevención del embarazo y violencia de género y de capacitación de funcionarios en planes de rehabilitación inclusiva de personas con discapacidad.
Ecuador, de su lado, apoya a Chile en materia de legislación sobre uso del suelo al ofrecer formación durante una semana a una misión chilena sobre esta temática por medio de reuniones, visitas de campo y encuentros con actores de ámbitos específicos.
Además, agregó Herrera, en su país se está instalando el programa «Quipux», un sistema de gestión documental utilizado dentro del sector público ecuatoriano, para su aplicación en el servicio de salud sur de la Región Metropolitana de Santiago. EFE (I)