Emelec y Barcelona disputaron el Clásico del Astillero 220 de su historia. El juego se llevó a cabo en el estadio Banco del Pacífico por la fecha 15 del Campeonato Ecuatoriano de Fútbol. Los dirigidos por Almada buscaban la victoria para luchar por la punta del torneo. Mientras que, los locales querían recuperarse del mal momento futbolístico que están atravesando. Las anotaciones llegaron por medio de: Ayrton Preciado y Bryan Angulo para los millonarios y para los toreros fueron: Michael Arroyo y Erick Castillo.
Ante un estadio copado por hinchas azules, Emelec salió al terreno de juego motivado por conseguir los tres puntos que le permita recuperarse anímicamente ante su rival de patio, Barcelona.
Los primeros 45 minutos, fueron muy intensos por ambos equipos. Los millonarios fueron los primeros que llegaron con peligro al arco custodiado por Máximo Banguera, luego de un cabezazo de Bryan Angulo que salió desviado por la última línea.
El esquema ofensivo del cuadro local empezó a dar frutos y al minuto 10, llegó el primer tanto del encuentro por medio de una gran jugada colectiva de los jugadores eléctricos, que a través de Ayrton Preciado, se adelantaron en el marcador.
Sin embargo, quedaba mucho tiempo por jugar y el cuadro torero no perdió el control. Es así que empezó a manejar la posesión del esférico hasta generar espacios que le permita llegar al área rival con peligro.
Es así que, al minuto 19 del cotejo, Ely Esterilla, sacó un potente remate que pasó desviado de la portería de Esteban Dreer, que solo la vio pasar.
Barcelona insistía con sus zagueros que atacaban por las bandas con peligro. Mientras que, la defensa de Emelec, no podía neutralizar los centros amarillos, ocasionando una infracción dentro del área, que el juez central decretó tiro penal.
Michael Arroyo fue el encargado de la ejecución desde los doce pasos, logrando la igualdad en el Capwell.
El partido empezó a ser reñido en el mediocampo, tras varias agresiones por los futbolistas, que el arbitro tuvo que amonestarlos para que el partido no se salga de control.
El cuadro eléctrico, fue el último en intentar adelantarse nuevamente en el marcador por medio de Marcos Mondaini, quien aprovechó un error de Banguera, pero el balón salió cerca del poste derecho.
Para la parte complementaria, ambas escuadras salieron al terreno de juego con los mismo planteles.
El “ballet azul” empezó a dominar el encuentro en la primera cuarta parte con jugadas de peligro que acechaban a los amarillos.
No obstante, el técnico, Guillermo Almada, se vio obligado a realizar algunas variantes para que el equipo tenga mayor movilidad en el gramado. El partido se convirtió de poder a poder, no sólo en la cancha, sino en la parte táctica.
El tiempo transcurría y los conjuntos no se sacaban ventajas, el partido fue muy disputado en todos los frentes.
Hasta que al minuto 69, el central, Omar Ponce, expulsó a Mario Pineida, debido a una falta sin balón en la mitad del campo. Asimismo, dos minutos después, Barcelona sufrió una segunda baja. Esta vez, el entrenador, Guillermo Almada, tuvo que abandonar la zona técnica por reclamos reiterativos al referí.
El bombillo se encontraba con superioridad numérica, pero no pudo hacer nada ante el cerrojo torero.
Cuando todo indicaba que el cotejo iba a terminar igualado, Bryan “Cuco” Angulo, aprovechó con una maniobra espectacular, un centro preciso de Jefferson Montero, que le dejó sin reacción al golero Banguera en el tiempo añadido.
Pero, en una noche inspirada por ambos equipos, llegó el empate de Barcelona en el último minuto ante una jugada extraña que Erick Castillo, estuvo atento al momento y la empujó al fondo de las redes eléctricas.
Así finalizó, el Clásico del Astillero, con emociones hasta al último instante ocasionando un gran espectáculo para los aficionados que acudieron al escenario deportivo.