Los doctores Bolívar Arízaga y Wilmer Arveláez, del Departamento de Órtesis y Prótesis del hospital Abel Gilbert Pontón, colocaron las prótesis en los brazos de Jéssica Ruiz, de 25 años, a quien su marido, Andrés Franco le cortó ambos brazos con un machete el pasado 8 de diciembre. Jessica llegó acompañada de su hermana Nancy Ruiz y su hijo Fernando.
Jéssica sonrió cuando escribió, con sus prótesis, primero su nombre, y luego el de sus dos hijos, de 4 y 7 años, procreados con el hombre que la atacó. «Me siento bien y a la vez nerviosa, pero ahora lo más importante es que voy a poder trabajar y velar por mis hijos”, dijo, citada por El Universo.
La tragedia ocurrió en el cantón Santa Lucía, en Guayas. La pareja estaba separada, “Esa noche me dejé llevar por los celos, estaba mareado, cuando la llamé me contestó un hombre. A ella nunca dejaré de amar”, dijo Franco, alias Guanchaca, cuando fue capturado. El hombre era buscado por otros tres crímenes.
Foto API/Marcos Pin
