Vandalizan paredes de famosa iglesia en Jerusalén

Abadía de la Dormición. Foto: laborio47.blogspot.com

JERUSALÉN (AP) — La policía israelí descubrió el domingo grafitis anticristianos escritos en hebreo sobre las paredes de una famosa iglesia en Jerusalén, en lo que parece ser el hecho de vandalismo más reciente de extremistas judíos.

La portavoz de la policía, Luba Samri, dijo que las frases fueron encontradas en las paredes exteriores de la Abadía de Dormition, un monasterio benedictino justo fuera de la Ciudad Antigua de Jerusalén y donde según la tradición cristiana murió la Virgen María.

El grafiti incluía amenazas de violencia, mensajes degradando a Jesús y una frase de que los cristianos deberían «ir al infierno».

Nikodemus Schnabel, portavoz de la Abadía Dormition, dijo que el grafiti llevaba «mensajes muy radicales».

La policía está investigando, pero las sospechas recayeron de inmediato en los extremistas judíos, quienes desde hace años han vandalizado propiedades palestinas y de otro tipo.

Los llamados ataques de «precio a pagar» son ataques aleatorios de extremistas y colonos judíos —incendios, destrozos, vandalismo y ataques con armas de fuego— contra los palestinos y sus propiedades, así como mezquitas, iglesias e incluso bases del ejército israelí. Los llaman así porque consideran que son el costo que deben absorber sus rivales a cambio de aquellas políticas o medidas —especialmente las del propio gobierno israelí— que creen que han favorecido a los palestinos.

Los nuevos ataques vandálicos provocaron una condena generalizada y la promesa del gobierno israelí de ser más duros con los vigilantes judíos.

El ministro de seguridad pública de Israel, Gilad Erdan, dijo que dio instrucciones a la policía de darle al caso del vandalismo la máxima prioridad.

«No permitiremos a nadie socavar la convivencia entre las religiones en Israel. Habrá tolerancia cero a quienquiera que perjudique los fundamentos democráticos de Israel y su libertad de religión y aprehenderemos a quienes realizaron este acto atroz», afirmó.

El primer ministro Benjamin Netanyahu también condenó el vandalismo.

La abadía benedictina es un lugar popular para peregrinos y turistas. Ha sido dañado varias veces en años recientes. Se cree que el vandalismo procede del mismo grupo de extremistas judíos que ha realizado ataques similares en los últimos años en represalia por los ataques palestinos o para protestar por lo que perciben como políticas del gobierno a favor de los palestinos.

 

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