Corte Constitucional inadmite la acción extraordinaria del médico Carlos López

ARCHIVO: Rueda de prensa de Juan Pablo Albán en defensa del Dr. Carlos López Ayala.

Quito.- La Corte Constitucional inadmitió la Acción Extraordinaria de Protección presentada por el Dr. Carlos López Ayala respecto de la sentencia en su contra, que le condena por supuesta «falta de atención» médica a la ciudadana francesa Charlotte Mazoyer.

En otras palabras, se mantiene en firme la sentencia de la Corte Nacional de Justicia contra López, la cual le condena a 12 meses de prisión. Sus abogados han asegurado que el médico no se esconderá si es que se pretende ejecutar la detención y seguirá desempeñando las actividades habituales de su vida y de su profesión.

Además, la decisión de la Corte Nacional implica el agotamiento de los recursos internos, por cuanto el Dr. López podrá pedir la protección tanto del Sistema Interamericano de Derechos Humanos como del Sistema Universal, opciones que no ha descartado.

En opinión de la abogada Belén Aguinaga, integrante de su equipo de defensores, López «cumplió su deber moral de ser humano y de médico, atendió a una paciente con herida de bala que le atravesó órganos vitales», en un esfuerzo de 5 horas, «con rigor científico y apegado a protocolos internacionales de manejo de trauma».

La condena que López ha recibido es por el Artículo 13 de la Ley de Derechos y Amparo al Paciente, que tiene que ver con negarse a atender a un paciente en un centro médico. A esto, la abogada responde que López fue el tercer médico que esa noche fue llamado para atender la emergencia (ninguno de los dos primeros cardiotorásicos se presentó), llegó en 5 minutos y «trató de salvar la vida de la paciente».

López también es acusado, por la familia de la ciudadana francesa, de retrasar la atención y además se lo cuestiona por intervenir a la paciente pese a que él es cirujano general y no cardiotorásico.

Charlotte Mazoyer, fue víctima de un asalto en el sector de Guápulo el 9 de diciembre de 2009, durante el cual fue herida de gravedad por proyectiles que, horas después, le causaron la muerte. (I)

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