Quito.- El Dr. Carlos López Ayala, profesional de la medicina, ha sido trasladado la tarde de hoy, desde el centro de salud donde realiza su consulta, a la Unidad de Flagrancia. Esto, ejecutando la sentencia de condena por una presunta “falta de atención” médica a la ciudadana francesa Charlotte Mazoyer.
Los abogados del médico han confirmado su captura, como resultado de una sentencia condenatoria de la Corte Nacional de Justicia, que le ordena cumplir 12 meses de prisión. El Dr. Juan Pablo Albán, jefe del equipo de defensores de López, ha corroborado que el profesional de salud tendrá que pasar esta noche en el calabozo de la Unidad de Flagrancia hasta que el Tribunal de Garantías Penales decida el lugar al que será conducido. Todavía los abogados no pueden hablar con el detenido. Por eso Albán pidió al Consejo de la Judicatura que permita al Dr. López recibir ropa adecuada y comida para esta noche. Horas después se trasladó al medico a la Cárcel Cuatro.
Albán, además, denuncia que se ha dilatado el recurso de revisión de la sentencia de Corte Nacional sobre este caso, en la lucha por determinar su inocencia.
Por su parte, Gabriela López, la hija del médico detenido, ha manifestado que a las 3pm su padre fue detenido en el Hospital Andrade Marín. “Estamos muy preocupados, al momento no podemos hablar con mi papá, no dejan que vea a sus abogados ni que hable con su familia” ha manifestado Gabriela, la única persona de la familia que se encuentra en Quito en este momento. A horas de la noche pudo reunirse con su padre.
Ella ha anunciado que, ante el agotamiento de recursos internos en Ecuador, se habilita la posibilidad de defender los derechos humanos del Dr. López en instancias internacionales. “Hemos constatado que en el país no se respetan los derecho, acudiremos a instancias internacionales y continuaremos la lucha para limpiar el nombre de mi papá, él es una persona inocente”, ha dicho.
Esta tarde han acudido a la Unidad de Flagrancia, en la Av. Patria y 9 de Octubre de la capital, familiares, amigos, colegas, estudiantes y dirigentes de organizaciones de médicos para apoyar al Dr. Carlos López y rechazar su detención.
La condena que López ha recibido es por el Artículo 13 de la Ley de Derechos y Amparo al Paciente, que tiene que ver con negarse a atender a un paciente en un centro médico. López fue el tercer médico que la noche del intento de robo y agresión a Charlotte Mazoyer fue llamado para atender la emergencia (ninguno de los dos primeros cardiotorácicos se presentó), llegó en 5 minutos y “trató de salvar la vida de la paciente”.
López también es acusado, por la familia de la ciudadana francesa, de retrasar la atención y además se lo cuestiona por intervenir a la paciente pese a que él es cirujano general y no cardiotorácico.
Charlotte Mazoyer, fue víctima de un asalto en el sector de Guápulo el 9 de diciembre de 2009, durante el cual fue herida de gravedad por proyectiles que, horas después, le causaron la muerte.
Hace algunos meses la abogada Belén Aguinaga, integrante de su equipo de defensores de López, dijo a este portal que el médico “cumplió su deber moral de ser humano y de médico, atendió a una paciente con herida de bala que le atravesó órganos vitales”, en un esfuerzo de 5 horas, “con rigor científico y apegado a protocolos internacionales de manejo de trauma”.(I)