Quito, 7 mar (EFE).- La huelga internacional por el Día de la Mujer en Ecuador busca recuperar el respeto a los derechos femeninos, la complementariedad de género y la no violencia, en conmemoración a una fecha que ha estado cubierta de sangre.
Así lo señaló hoy a Efe Luisa Lozano, dirigente de la Mujer de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), co-organizadora de las actividades por el 8 de marzo, conjuntamente con otros colectivos femeninos.
«Nosotras no celebramos el 8 de marzo, para nosotras es una fecha de conmemoración que nos permite seguir reivindicando los derechos que nos asiste como mujeres«, añadió Lozano.
Las mujeres en el mundo «trabajamos por la igualdad y la complementariedad» de género y en el Día de la Mujer se lucha para «que se escuche nuestra voz, para estar presentes, vivas siempre, para que se respeten los derechos, aunque para nosotras es una fecha cubierta de sangre», remarcó.
Se refirió a la historia del origen de la conmemoración, que recuerda la muerte de cientos de mujeres trabajadoras en Nueva York en marzo de 1909, así como las protestas por los derechos femeninos en varias partes del mundo.
Las mujeres, dijo Lozano, «tenemos un compromiso a nivel general, cambiar este mundo, frenar la violencia, trabajar con los valores, recuperar el respeto» en la sociedad.
La dirigente indígena recordó que la discriminación contra la mujer aún se vive con fuerza en el mundo y en su país y puso como ejemplo que muchas instituciones públicas y privadas no brindan los permisos correspondientes a sus empleadas para asistir a las diferentes actividades que se programan por el 8 de marzo.
Recordó que se han organizado para mañana «plantones, marchas, foros», pero dijo que la actividad central es «la marcha mundial de las mujeres«.
Para Lozano, «no sólo el 8 de marzo» se debe conmemorar el Día de la Mujer, pues «todos los días debería estar presente la voz» femenina, porque «todos los días se sufre violencia física, doméstica, sexual. No podemos permitir más» esta situación, apuntó.
De su lado, el colectivo «Vivas nos queremos» ha convocado a un «cacerolazo» en Quito, como parte de la huelga internacional feminista que se replicará en varias ciudades del mundo.
Esa protesta tendrá lugar en las inmediaciones del Ministerio de Relaciones Laborales, en Quito, con el objetivo de concienciar a la población sobre la brecha salarial que perjudica a las mujeres, según señaló ese colectivo.
«Nosotras aún ganamos salarios 25% a 30% menores que los hombres, desempeñando la misma función y realizando el mismo trabajo», precisa un manifiesto publicado en sus redes sociales. EFE
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