La Fundación Zegna, cuando la moda invierte en labor social

La Fundación Zegna, cuando la moda invierte en labor social. Foto de EFE.

Trivero (Italia), (EFE).- La Fundación Zegna, ligada a la casa de moda italiana del mismo nombre creada en 1910, es un ejemplo, como otros en Italia, de firmas textiles consagradas que traspasan las coordenadas de la moda para invertir en la difusión artística y social.

Posiblemente Ermenegildo Zegna sea una de las marcas de ropa más exclusivas de Italia y del mundo, y una de las empresas más reputadas a nivel internacional.

Pero no solo, sino que gracias a su labor principalmente social es actualmente vista como algo más que una mera industria textil.

Creada en el año 2000, la Fundación Zegna tiene como base principal «el respeto de los valores que durante su vida defendió» el diseñador Ermenegildo Zegna, explicó la presidenta de la fundación, Anna Zegna, en una entrevista con Efe.

«La fundación está inspirada y dedicada a nuestro abuelo Ermenegildo y tiene cuatro ámbitos de actuación: social, cultural -con gran atención a los jóvenes-, médico, y la protección del medioambiente y del patrimonio», afirmó Anna Zegna.

Actualmente, la fundación opera en diversos países con iniciativas «que quieren transmitir una visión sostenible», como por ejemplo en Sudamérica, concretamente en Brasil, donde «una orquesta ayuda a los jóvenes a salir de la violencia a través de la música» en algunas favelas.

También están muy presentes en Trivero, un municipio de unos 6.000 habitantes en plenos Alpes y ubicado en la provincia de Biella, en el Piemonte (norte de Italia), donde precisamente acaba de inaugurar la edición 2015 de «All’ Aperto», comisariado por Andrea Zegna y Barbara Casavecchia.

Esta séptima edición corre a cargo de la artista italiana Liliana Moro y prevé, entre otras cosas, la apertura de un puesto informativo turístico en la plaza del pueblo que permitirá a los habitantes y a los visitantes disponer de información sobre el territorio de forma gratuita.

Trivero, un lugar en el que la naturaleza envuelve a sus habitantes con un paisaje absolutamente onírico, tiene un significado especial para la firma italiana porque es donde se conserva su verdadera esencia: es donde Ermenegildo Zegna empezó a edificar su imperio.

El diseñador y empresario nacido en 1892 comenzó con la creación de una fábrica que cuenta actualmente con unos 500 trabajadores y que aún hoy presume de ser el único laboratorio de la firma del que salen todos los tejidos que posteriormente se distribuyen y sirven para confeccionar las prendas que llenan los guardarropas masculinos.

Dio así sus primeros pasos en el sector de la confección con esta fábrica, pero a partir de ahí expandió su influencia por Trivero siguiendo una máxima: estaba convencido de que la calidad del producto estaba estrechamente relacionada con la belleza de sus alrededores y con el bienestar de la gente involucrada, tal y como explican desde la fundación.

Por ello, «dotó a Trivero de una biblioteca, un gimnasio, un cine» y de un camino a lo largo de la montaña y en torno al cual sembró miles de plantas y levantó «escuelas, hospitales y restaurantes».

Hoy, esta calle permite el acceso a un parque natural de «unos 100 kilómetros cuadrados» que recibe el nombre de Oasis Zegna, «un auténtico paraíso para quien ama la naturaleza y la respeta, y uno de los grandes valores de Italia», en palabras de la presidenta de la fundación, nieta de Ermenegildo Zegna.

Además del patrocinio de obras artísticas y de la inversión en obra social, esta familia de empresarios italiana también desarrolla una «labor educativa con los más pequeños» a través de actividades que fomentan su interacción y sus capacidades cognitivas.

Muchas de estas iniciativas se celebran dentro de la Casa Zegna, donde se encuentra el lanificio y también un espacio en el que se conservan «tesoros de un valor sentimental incalculable pero también histórico», como cuadernos con anotaciones del propio modisto durante sus años como profesional acerca, por ejemplo, «de los tejidos utilizados en distintas prendas».

La Casa y el Oasis Zegna en Trivero son, por tanto, un auténtico «museo abierto al público», testimonio del nacimiento y crecimiento de una de las realidades más notables del sector empresarial familiar de Italia. EFE

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