Montevideo, (EFE).- La Semana Criolla, uno de los grandes acontecimientos festivos de Uruguay en el que diversas expresiones de la cultura de los gauchos se dan cita en Montevideo, arrancó hoy su 91 edición con un énfasis especial en la participación de las mujeres en un ámbito tradicionalmente ligado a la masculinidad.
Así lo explicó a Efe Mariana Percovich, directora de Cultura de la Intendencia de Montevideo (IM), quien destacó además los esfuerzos del Gobierno de la capital uruguaya para llevar la igualdad de género a todos los planos de la identidad de la ciudad y del país, incluso a acontecimientos de raigambre tradicional como la Semana Criolla.
«La igualdad se trabaja a muy distintos niveles: no solamente en lo que tiene que ver con igualdad de derechos, sino a veces en espacios simbólicos como estos, con una tradición asociada a la masculinidad», explicó Percovich.
Por eso, en el acto inaugural, las banderas oficiales de Uruguay fueron izadas por Percovich acompañada de dos mujeres pertenecientes al mundo de las «jineteadas», la principal atracción de la Semana Criolla, en la que los gauchos montan sobre caballos salvajes que intentan domar.
Además, en el primer desfile en torno al «ruedo» (rodeo), fueron mujeres las que enarbolaron las banderas de Uruguay, Argentina, Brasil y Chile, los países con representación en este acontecimiento, que congregará a 90 jinetes que protagonizarán 720 montas.
En ese sentido, la directora de Cultura de la IM recalcó que en esta Semana Criolla se busca representar a las mujeres rurales en todos sus roles, «no solamente como ‘esposas de’, sino como protagonistas por primera vez en 91 años».
«Las mujeres hacen una cantidad de tareas. Son tropilleras (pastoras de caballos), acompañan y crían hijos, cultivan. Entonces la presencia de la mujer en la Semana Criolla va a estar en los artesanatos, pero también con el protagonismo en el propio ruedo», precisó.
Por su parte, el intendente interino de Montevideo, Óscar Curutchet, indicó que se espera que pasen unas 200.000 personas durante los ocho días en los que se llevará a cabo este acontecimiento, del 20 al 27 de marzo.
Esta afluencia, explicó, representa «la importancia de la (Semana) Criolla para Uruguay y su identidad nacional, por lo que Montevideo se suma a esta fiesta cultural que vive todo el país».
Precisamente durante estos días, la capital, que aglutina casi la mitad de los aproximadamente 3,4 millones de habitantes de Uruguay, se fraterniza con el interior del país de manera particular.
Así, los capitalinos y los turistas que visitan Uruguay pueden encontrar en los predios de la Asociación Rural una conexión con el Uruguay profundo y, además de las «jineteadas», presenciar otras manifestaciones de la cultura gauchesca.
Entre estas, se destacan las peñas folclóricas, así como las «payadas», las rimas improvisadas de los comentaristas del ruedo acompañadas por guitarras para describir lo que sucede cuando los gauchos se montan a los caballos salvajes y los intentan hacer «corcovear» (saltar).
«Para muchos niños montevideanos, esta es la única oportunidad de conocer el campo. De alguna manera la Criolla con sus miles y miles de participantes sigue comprobando esta necesidad de hermanarnos como país, capital y campo, así que por eso la IM continúa con esta tradición», concluyó Percovich. EFE (I)