Cómo bajar los dos kilos que subiste de farra el fin de semana

Captura de pantalla del segmento "4 minutos" del diario El País.

Según un estudio realizado por la Asociación Dietética Británica, una persona puede subir hasta dos kilos en un fin de semana de fiesta. «Lo primero que hay que hacer es retomar el ejercicio físico y los hábitos alimenticios saludables. No podemos pretender perder los kilos que hemos ganado en dos días, ayunando o con un ejercicio extremo al que no estamos acostumbrados», advierte el entrenador, Gonzalo Maganto, que presenta el segmento de ejercicios del diario El País.

El especialista propone un circuito de alta intensidad que ayudará a perder el peso ganado. Como no sirve de nada desesperarse por esos kilos que ahora complican el momento de subir la cremallera del pantalón, debemos centrarnos en un plan a largo plazo que nos permita perder peso sin volver a ganarlo rápidamente. «Pensar que podemos compensar el exceso calórico machacándonos con ejercicio es un error muy típico. Pero no vale darse un atracón y querer arreglarlo con una sesión de ejercicio extremo porque lo único que conseguiremos es lesionarnos. Lo que necesitamos es ser constantes y mantener una rutina diaria saludable».

Con estos seis ejercicios de alta intensidad, en los que trabajan cada uno de los músculos del cuerpo, se busca aumentar las pulsaciones para acelerar el metabolismo basal. «De esta forma, el cuerpo se mantiene activo y no se coge peso tan fácilmente porque aumenta el número de calorías que nuestro organismo quema estando en reposo», apunta Maganto. Para que los resultados no tarden en llegar, lo ideal es realizar tres series del circuito, descansando un minuto entre una y otra, dos veces por semana. «Es un trabajo intenso, sencillo, rápido y se puede hacer desde casa. 15 minutos bien ejecutados son tan efectivos, o más, como una hora de ejercicio de menor intensidad». Pero lo más importante para lograr la eficacia es respetar los tiempos. «Entre un ejercicio y otro hay que hacer 30 segundos de descanso activo. Es decir, un ejercicio moderado con el que las pulsaciones disminuyen sin llegar a estar en reposo», explica.

Para evitar lesiones se debe adecuar la intensidad de los ejercicios a las condiciones físicas de cada uno. «Además, es conveniente llevar un pulsómetro que controle que no trabajamos por encima del 90 % de nuestra frecuencia cardiaca», señala.

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