Aprendiendo de los uruguayos

Por David Ochoa

Uruguay ganó la Copa América, nada menos en casa de su centenario rival, la República Argentina. La Celeste vuelve a saborear resultados exitosos tras años de resultados negativos: en el mundial de Sudáfrica quedó cuarto y ahora es campeón del torneo continental. Creo que podemos aprender de los uruguayos muchas lecciones, en el fútbol y también en otras áreas.

El Director técnico Óscar Tabárez está al frente de la selección uruguaya desde 2006. No clasificaron a Alemania ese año, pero los resultados de la estabilidad del cuerpo técnico se reflejaron en Sudáfrica 2010 y ahora en Argentina 2011. Una gran ventaja de Tabárez es poder contar con jugadores de gran nivel: de los 23 convocados, 16 juegan en Europa y otros en las competitivas ligas de Brasil y Chile. El nivel del campeonato uruguayo es muy alto.
En juveniles, ha sido subcampeón a nivel de Sub 20 y, recientemente, Sub 17. Ha participado diez veces en mundiales Sub 20 y cuatro, en los Sub 17. Seguramente las apuestas están a favor de los charrúas para el Mundial Sub 20 que comienza en Colombia.

El presidente de la asociación uruguaya fue elegido apenas en 2009, pero fue reelegido y cumplirá un mandato hasta 2014. Aunque podría ser de aquellos dirigentes que se atornillan a sus cargos, al menos Sebastián Bauzá puso fin a una época de inestabilidad dirigencial que duró varios años.

El palmarés histórico de Uruguay no puede compararse con nuestra modesta participación internacional a nivel de selecciones, lo cual puede ser una ventaja, pues la actual generación de jugadores ecuatorianos tiene una vara a superar menos exigente que la de los uruguayos: si clasificamos a Brasil 2014 nos sentiremos satisfechos, aunque no logremos avanzar a Octavos de final. Uruguay llegará dispuesto a arrebatarle el protagonismo al dueño de casa, como lo acaba de hacer en Argentina.

Para Uruguay, como para nosotros, el fútbol fue un medio para consolidar la identidad nacional: los partidos de inicio del siglo pasado con Argentina los diferenciaron y destacaron frente al gran vecino del Río de la Plata. Luego, los campeonatos mundiales de 1930 y 1950 han sido una inspiración y motivo de orgullo por muchos años, aunque también fueron un dopaje de nostalgia, como recuerda Eduardo Galeano.

En otras áreas, el Ecuador ya está aprendiendo de los amigos uruguayos: los famosos “borregos regalados” son en realidad vendidos por el Banco Nacional de Fomento a campesinos de la Sierra para mejorar la producción ovina. Este proyecto es importante porque, de ser exitoso, motivará a los campesinos a acercarse sin miedo a los avances de la biotecnología para mejorar los ingresos familiares sin abandonar el campo. Otras estrategias de cooperación para mejorar la productividad debieran estar ya llevándose a cabo.

Desde hace dos años, Ecuador intercambia crudo por derivados de petróleo con Uruguay. Aunque no tienen yacimientos, los uruguayos tienen su propia refinería, por ello asesoran al Ecuador en los proyectos de refinación y en gestión empresarial en el sector hidrocarburos.
Cuando el neoliberalismo estaba de moda, el pueblo detuvo el plan privatizador del presidente Luis Alberto Lacalle mediante consulta popular (1992). Políticamente, las agrupaciones de izquierda se fueron integrando paulatinamente hasta que en 2005 todas se integraron al Frente Amplio que pasó de ser una asociación ilegal en los setentas, a la fuerza política más importante desde 2005.

El socialista Tabaré Vásquez procuró hacer un gobierno de izquierda “vegetariana” aunque su visita a Fidel Castro levantó fuertes críticas. Aunque Vásquez demostró su lado curuchupa al usar el veto presidencial para mantener el delito sobre el aborto, se retiró con altos niveles de popularidad y ahora asesora al Ecuador en prevención y tratamiento de cáncer, dada su experiencia como oncólogo.

Desde 2010, Pepe Mujica gobierna a los uruguayos con guante de seda y pragmatismo. A él se le atribuye la manida frase “la mejor ley de comunicación es la que no existe”. Tan necesaria fue una ley de comunicación, que en 2009 se expidió una que recogió los principios de los convenios internacionales sobre la materia, suprimió el delito de injurias mediante medios de comunicación (salvo que se pruebe real malicia de quien agravia), ratificó el delito de atentar contra la vida del Jefe de Estado, mantuvo el delito de “desacato” como desobediencia a una orden de juez o autoridad, pero señalando explícitamente que “nadie será castigado por manifestar su discrepancia con el mandato de la autoridad”. Esta ley tipifica como delito tanto la difusión de noticias falsas como el provocar un delito usando un medio de comunicación.

La misma ley ordena el archivo del juicio penal apenas el medio de comunicación publique una rectificación o desagravio en el mismo espacio.
Hay mucho que puede enseñarnos Pepe Mujica: a sus 76 años tiene paciencia y sabiduría suficiente para escuchar con serenidad y lidiar con los retardos y zancadillas que pone la oposición. Mujica vive en el campo, en su casa de siempre, con su esposa, Lucía, quien a la sazón es Presidenta del Legislativo.

Pero también puede aprender mucho la prensa ecuatoriana de sus colegas uruguayos. Allá, los medios públicos no son tachados de gobiernistas sin matices ni sustentos. Seguramente la prensa se equivoca, pero menos. Es imposible que allá se hubiese publicado que el Presidente se está construyendo una mansión en un valle de lujo, como se publica aquí. No se cómo reaccionaría Pepe Mujica frente a la mala fe que algunos periodistas demuestran.
Aprendamos, todos, de los amigos uruguayos.



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2 Comments

  1. ¿Cuál es el índice de analfabetos en Uruguay?
    ¿Cómo vamos a aprender de los uruguayos, si stenemos un verdadero lastre social que nos subyuga desde hace más de 150 años: La ignorancia y la miseria.

  2. ¿Cuál es el índice de analfabetos en Uruguay?
    ¿Cómo vamos a aprender de los uruguayos, si stenemos un verdadero lastre social que nos subyuga desde hace más de 150 años: La ignorancia y la miseria.

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