
Daniel Salcedo desea decirle a la Fiscalía todo lo que sabe acerca de la trama de corrupción del caso Purga, investigación que se deriva del caso Metástasis en el que es uno de los 52 procesados. Con una condición, a cambio, solicitó entrar al sistema de protección de testigos y víctimas.
En su versión voluntaria y libre aceptó haber recurrido a la estructura criminal que operaba en la Corte Provincial de Justicia del Guayas y que, de acuerdo con el ministerio público, dirigía el exlegislador socialcristiano, Pablo Muentes; por medio de Mayra Salazar, también procesado en el caso Metástasis, a quien conoce desde hace años.
Salcedo afirmó que lo hizo para conseguir fallos favorables en las causas penales abiertas en su contra desde la pandemia y reveló los montos que le cobraron.
«Mayra me dijo que podrían ayudarme a que las suspensiones de audiencia se den», para ello, el dinero solicitado era de USD 2 000 a 5 000 «entregados por operadores míos, nombres que entregaré cuando esté ingresado al programa», dijo Salcedo.
Cuando se trataba de tramitar recursos o de dictar sentencias, las tarifas que describió Salcedo eran mucho más altas. Él contó que a tres jueces actualmente procesados en el caso: Johann Marfetán, Reinaldo Cevallos y Alberto Lino, les pagó mucho más.
Por ejemplo, a Marfetán, dijo que le mandó USD 20 000 por un habeas corpus, lo identificó como el operador de Fabiola Gallardo, la expresidenta de la corte.
A Cevallos, quien estuvo a cargo de uno de sus juicios por corrupción hospitalaria, reveló que le pagó USD 70 000 por su traslado a otra prisión. En tanto que con Lino, ponente en un caso por peculado, dijo haberse reunido tres veces.
«Me solicitaba el valor de USD 100 000 para la inocencia. Le comenté que el caso era sencillo, pero me dijo que si no pagaba esos valores, me sentenciaba como agravantes. Entonces le dije que me dé unos días para poder llegar a la cifra solicitada», dijo Salcedo.
Así mismo, contó haber tenido encuentros con Fabiola Gallardo, «a lo largo del tiempo nos dimos cuenta que Mayra y Fabiola eran las flechas para poder manejar a los jueces y poder conseguir sentencias y diferimientos», agregó.
Mayra le presentó a Fabiola Gallardo, quien según el procesado le comentó que podría ayudarlo revisando el caso «me preguntó cuánto estaría dispuesto a pagar por la ayuda, yo le contesté el valor de USD 150 000». USD 50 000 para cada juez y USD 50 000 para Gallardo.
El dinero finalmente no se entregó porque a los jueces los estaban rotando «cada que rotaban ella tenía que hacer un acercamiento con los jueces que se asignaban a mis causas».
Según Ecuavisa, así Salcedo confirmó todo lo descrito en los chats que forman parte del expediente del caso Purga.