Un grupo de personas se reunieron en Cuenca para protestar en contra de la minería que se pretendía instauran en Kimsacocha. Sin embargo, el presidente Daniel Noboa indicó la semana pasada que el proyecto minero Loma Larga ya no se dará y dijo que la prefectura del Azuay y el alcalde de Cuenca deberán afrontar el tema económico en caso de un arbitraje internacional.
«Yo no voy a seguir con este proyecto», sentenció Noboa. «Yo no voy a seguir con este proyecto, es más, por eso está el comunicado oficial. Municipio y Prefectura, háganse cargo, pero si el día de mañana tienen que ir a la corte de Londres, a pelearse con Dundee, tienen que ir y sustentar sus informes», dijo el presidente.
La convocatoria de las organizaciones sociales que lideran la oposición a las actividades mineras en Cuenca se expandió entre gremios de profesionales, universidades, colectivos de mujeres, artistas, grupos de amigos, entre otros.
También se han sumado organizaciones nacionales, como la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), que convocó a sus bases a participar en la marcha.
Poco antes del inicio de la marcha, el presidente Daniel Noboa firmó un decreto ejecutivo que declara el estado de excepción en siete provincias, incluyendo a la provincia del Azuay. (I)