
La ONG Amnistía Internacional (AI) urgió este martes a Israel a poner «fin al genocidio» contra la población palestina en la Franja de Gaza, además de exigir la liberación de los 48 rehenes.
«Cada momento que pasa, la inacción se cobra más vidas. El alto el fuego no es sólo un imperativo moral; es una obligación mundial. Israel debe detener su genocidio en Gaza, incluida la política de hambre deliberada y el desplazamiento forzado», declaró la secretaria general de AI, Agnès Callamard.
En su comunicado, Callamard instó también a los grupos armados palestinos a liberar a todos los rehenes civiles, entre los que se estima que unos 20 -todos hombres- seguirían con vida; quienes se encuentran en grave riesgo de muerte o tortura.
La organización recalcó que la población civil no debe ser usada como «moneda de cambio», y recordó que desde los ataques de Hamás del 7 de octubre de 2023, Israel ha intensificado las detenciones entre la población palestina, muchos sin cargos ni juicio.
«Miles de gazatíes han sido arrestados en operaciones militares, en muchos casos sometidos a desnudez forzada y tortura antes de su traslado a bases de detención en Israel», agregó.
Amnistía Internacional, que cita datos de la ONG israelí Hamoked, afirmó que Israel mantiene arrestados a unas 11.040 palestinas, alrededor del 57 % sin cargos ni juicio, según cifras del 1 de septiembre.
Además, al menos 76 palestinos han muerto bajo custodia desde el 7 de octubre, según la Comisión de Personas Detenidas, mientras que el Centro de Derechos Humanos y Asistencia Jurídica de Jerusalén, JLAC, denuncia que Israel retiene «como moneda de cambio» los cuerpos sin vida de al menos 730 palestinos, algunos desde hace décadas.
Una comisión independiente de la ONU, relatores de derechos humanos, ONG y un creciente número de países califican de genocidio la ofensiva militar israelí contra la Franja de Gaza, en la que ya han muerto más de 66.000 palestinos, entre los que hay más de 20.000 niños. EFE (I)